El presidente Jair Bolsonaro advirtió ayer a los líderes evangélicos que vetará la legalización de los juegos de azar si el tema es aprobado en el Congreso. Y ayer, el pedido de tratamiento de urgencia en la Cámara de Diputados fue retirado del orden del día, en medio de un fuerte embate evangélico contra esta medida.
El pastor Silas Malafaia, estrecho aliado de Bolsonaro, dijo que el presidente reiteró su posición y calificó el proyecto de “absurdo”. En medio de la presión de los evangélicos, la Cámara pospuso la votación del pedido de urgencia para el análisis del proyecto, que había sido incluída en la agenda de ayer, lunes 13.
“Hablé con el presidente por teléfono después de publicar mi vídeo, y me dijo que iba a vetar la Ley. Dijo que esto es absurdo, que no colabora con la economía y que perjudica a los jubilados”, dijo Malafaia. Bolsonaro ya había declarado en septiembre, en una entrevista con la revista Veja, que sería “natural” vetar el proyecto, pero reconoció en ese momento que existe legalmente posibilidad de que el Congreso anule su veto en el futuro.
Los líderes evangélicos argumentan que un veto de Bolsonaro, en caso de aprobación del proyecto, daría más tiempo para que la bancada religiosa en el Congreso se articule en contra del tema. A través de un video dado a conocer recientemente, Malafaia había calificado el proyecto de “vergüenza social” y criticaba al presidente de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, por “querer aprobar esta basura” sobre el cierre de las sesiones legislativas.
“El 90% de la población brasileña gana hasta cinco salarios (mínimos). Esto es algo tan vergonzoso que sólo interesa a los grupos económicos poderosos y a los blanqueadores de dinero corruptos. No beneficia en absoluto a la economía del país. No vengas a hacer comparaciones con Estados Unidos y Europa, que tienen otro nivel social”, dijo el pastor en su video.
Lira llevó adelante reuniones en las últimas semanas con las diferentes bancadas, para abordar los proyectos que serían prioritarios en la recta final del año legislativo, y escuchó al Frente Parlamentario Evangélico al asegurarle que su prioridad sería frenar la legalización del juego.
La inclusión del requisito de urgencia en el orden del día de este lunes disgustó a la bancada evangélica, que prometió impedir su tratamiento. Si se aprueba la solicitud, el texto podrá votarse en el Pleno. El presidente del grupo, Cezinha de Madureira, intervino afirmando que el grupo está “terriblemente en contra” del proyecto, y reiteró que Bolsonaro ya prometió vetar la propuesta.
“He hablado con el presidente Bolsonaro hace un tiempo y prometió vetar la propuesta. Pero nos organizaremos para ni siquiera entre en el orden del día”, dijo el parlamentario. Según Cezinha, habló con el presidente Arthur Lira y le aseguró que “se trataba de una agenda que no podía votar de ninguna manera. Dije que bloquearía si se votara. Brasil no está preparado para este tipo de situaciones. Tenemos una gran parte de la población pobre, y otra parte, jubilada. Hay estudios que demuestran que las personas mayores son las más perjudicadas por la adicción. Y es un camino que puede llevar a los jóvenes, incluso a las drogas”, enfatizó.
El diputado Sostenes Cavalcante agregó que Lira incumple el acuerdo al establecer la solicitud de urgencia: “Lo que nos dijo, en una reunión con 70 invitados, es que si se establece el orden del día, sería de común acuerdo”. Cabe recordar además que el texto aún no ha sido presentado oficialmente, y está en manos del Grupo de Trabajo creado por el propio Arthur Lira, en septiembre.
Anoche, lunes 13, el vicepresidente de la Cámara de Diputados, Marcelo Ramos, dijo en la apertura del orden del día que el pedido de urgencia al PL 442/91 del Marco Regulatorio de los Juegos sería retirado del orden del día de la votación. La solicitud no fue considerada, debido al quórum reducido, ya que se requiere una mayoría absoluta o 257 votos para la aprobación de una solicitud de urgencia. En el momento de la apertura del orden del día, la sesión extraordinaria sólo contaba con 162 parlamentarios. La votación sobre el pedido de urgencia es el primer paso en el análisis de la propuesta por parte del pleno de la Cámara. Con la aprobación de urgencia, el proyecto de ley aún puede ser considerado esta semana por el Pleno.