El Ministerio Público Fiscal de Salta informó que la fiscal penal subrogante de la Unidad de Delitos Económicos Complejos (UDEC), Ana Inés Salinas Odorisio, requirió un juicio al Juzgado de Garantías 7 para Fausto Gustavo Puentes, Pedro Gustavo Puentes y Sofía Macarena Puentes, a quienes acusa del delito de explotación de juegos de azar sin autorización.
De acuerdo a la fiscal, existen pruebas suficientes para sostener que el padre y sus dos hijos organizaron de sorteos, cuyos números ganadores se determinaban utilizando la Tómbola Salteña, sin la debida habilitación del Ente Regulador del Juego de Azar (EnReJA).
En el requerimiento de juicio, Salinas Odorisio señaló que, en la provincia, las licencias para la explotación de juegos de azar son otorgadas exclusivamente a personas jurídicas. Por lo tanto, al carecer de habilitación legal, los acusados habrían generado un perjuicio económico al Estado Provincial.
La intervención de la UDEC se inició a partir de la acumulación de 43 denuncias de características similares. En ellas se señalaba que los tres acusados habían creado un grupo en la aplicación WhatsApp denominado “La Pesca con Gustavo”, con el fin de realizar sorteos de distintos elementos de pesca y camping.
Según detallaron, Fausto Gustavo Puentes habría sido quien organizaba y explotaba los sorteos: habría informado los números y los premios disponibles, y habría proporcionado en el grupo los datos de su billetera virtual para que los participantes realizaran las transferencias correspondientes. También habría asignado los números y compartido el horario en el que se realizaría el sorteo, utilizando como referencia los resultados de la Tómbola Salteña.
Por su parte, Sofía Puentes habría administrado el grupo de WhatsApp y, en ausencia de Fausto, habría organizado los sorteos y coordinado la entrega de los premios. Una vez que los participantes enviaban los comprobantes de pago, eran ingresados al sorteo. Según el monto abonado, variaba la cantidad o calidad del premio asignado.
Desde el Ministerio explicaron que el padre y los dos hijos habrían recibido dinero de los participantes y habrían continuado administrando los sorteos hasta diciembre de 2024, cuando comenzaron a incumplir con las entregas. Durante varios meses, numerosos participantes reclamaron los premios que aseguraban haber ganado, sin obtener respuesta.