A pesar del reciente impulso que recibió en la Cámara de Diputados la puesta en marcha de un proyecto que legalizaría el juego, los casinos y el jogo do bicho en el país, el presidente Jair Bolsonaro afirmó en una entrevista que pretende vetar la propuesta.
Estancada desde el gobierno de Michel Temer, la regulación de las apuestas deportivas cobró impulso luego de que el presidente de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, creó un grupo de trabajo para discutir la legalización de casinos, máquinas tragamonedas y bingos, entre otros.
La idea es que el tema se vote en la Cámara antes de fin de año. La propuesta tiene entusiastas entre los colaboradores más cercanos al presidente, como el Jefe de Gabinete, Ciro Nogueira, pero se encuentra con la resistencia de los parlamentarios evangélicos.
Pero el mandatario dijo a la prensa que ya se le acercaron partidarios de la liberación de los juegos en el país, pero les dijo que la medida no contará con el apoyo del Gobierno para ser aprobada en el Congreso y, de seguir adelante, vetará la propuesta.
"Creo que habrá más por perder que por ganar en este momento. Si aprueban tengo mi veto, que es natural, y luego el Congreso puede anularlo. Sí, lo que se está discutiendo hasta ahora tendrá mi veto y punto", dijo Bolsonaro. “De momento, mi opinión sobre los juegos de azar es esa”, completó en una entrevista a la revista Veja.
La liberación de juegos de azar también es defendida por parlamentarios, que ven en la iniciativa la posibilidad de reforzar al sector turístico y hotelero del país.
En lugar de regular las apuestas, Bolsonaro dijo que tiene la intención de impulsar el sector facilitando el jet-ski. Según el presidente, sería posible obtener una licencia que permita usar una moto de agua usando la licencia de conducir común, y un descargo de responsabilidad. No hay fecha límite para que la idea tome impulso.
"Hay algo que quiero destacar: el jet-ski. Es caro, pero estoy en contacto con la Marina para facilitar la licencia de jet-ski. Hoy es muy complejo, y me gustaría que fuera similar a lo que pasa en Estados Unidos, donde usas tu licencia de conducir y un término de responsabilidad, porque en un minuto aprendes a conducir una moto de agua. Esto tiene que ver con el turismo en Brasil”, dijo. "Es el 0,001% del empleo, pero disparo en todas direcciones", aseguró.