Brasil: El proyecto de ley de casinos debería votarse en el primer semestre

El proyecto de ley 2234/22, que legaliza los casinos en complejos turísticos, los bingos y los juegos de azar, podría ser sometido a votación por el presidente del Senado, Davi Alcolumbre (União-AP), en el primer semestre del año. La afirmación la hizo el ponente del texto, el senador Irajá Silvestre (PSD-TO), en una conversación con periodistas el pasado jueves, 8 de mayo, informó JOTA.Info.

El proyecto de ley fue aprobado por un estrecho margen en junio del año pasado por la Comisión de Constitución y Justicia (CCJ), cuando Alcolumbre aún estaba al frente del órgano colegiado, lo que puede indicar la simpatía del presidente por la propuesta.

Irajá expresó a los periodistas que la propuesta "ya cuenta con el apoyo de la mayoría, pero las conversaciones entre el Gobierno y el Congreso continúan". Según el senador, ha estado en contacto con Hacienda, el Planalto y los ministerios de Turismo y de Fomento, Industria, Comercio y Servicios (MDIC).

El anterior presidente del Senado, Rodrigo Pacheco (PSD-MG), llegó a someter el proyecto a votación en el pleno a finales del año pasado, pero la férrea oposición de algunos senadores -especialmente los vinculados a la bancada evangélica- llevó a Irajá a pedir que se retirara del orden del día para no ser derrotado.

Investigación

Irajá es un firme partidario de la aprobación del proyecto de ley y, a petición suya, el Instituto DataSenado realizó una encuesta según la cual el 60% de los brasileños está a favor de la medida.

"Esta encuesta marca un antes y un después. Después de casi dos años y medio de discusión de este proyecto en el Senado Federal, donde ya realizamos algunas audiencias públicas y finalmente lo aprobamos en la Comisión de Constitución y Justicia, está listo, maduro para ser votado en el plenario del Senado", declaró Irajá a finales de abril, días después de la divulgación de la investigación.

Para el parlamentario, el resultado de la encuesta confirmó "lo que ya entendíamos como una señal de la sociedad brasileña, del pueblo brasileño". Entre los beneficios de la legalización del juego que Irajá suele señalar están la creación de puestos de trabajo, una mayor recaudación de impuestos y el fortalecimiento del turismo.