Fue alrededor de las 14 hs, después de que un grupo de manifestantes se trasladara a La Boca, con el objetivo de interferir en la salida de los catamaranes que la empresa contrató para trasladar a los empleados que van a trabajar y a algunos apostadores.
Luego de ser desalojados, los trabajadores despedidos se reagruparon en la Facultad de Ingeniería de la UBA, en Paseo Colón y avenida Independencia, desde donde marcharon hacia el Casino. Allí los esperaban unos 200 efectivos de Prefectura y de la Policía Federal que custodiaban las inmediaciones.
El Casino fue reabierto el viernes último por orden judicial, luego de permanecer un mes clausurado.
“Durante todo el fin de semana estuvimos acampando y pidiéndoles solidaridad a los clientes que iban a jugar al Casino. La mayoría entendió nuestro reclamo y se retiró, sin entrar a jugar. Pero ahora nos reprimieron y nos sacaron del lugar”, dijo Gastón Platkwoski, uno de los delegados.
Los delegados que están reclamando la incorporación de las decenas de empleados despedidos están enfrentados con el gremio de trabajadores de juegos de azar, ALEARA, que conduce el legislador porteño Daniel Amoroso.
En sintonía con la empresa, el sindicato aseguró que el 80% de los empleados está trabajando y denunció "los métodos violentos" de los manifestantes.