Rodrigo Paz, quien recientemente asumió la presidencia de Bolivia, anunció que enviará al parlamento un proyecto de ley que propone eliminar impuestos a los juegos de azar.
El proyecto incluye la eliminación de diversos impuestos, abarcando también a las transacciones y las promociones financieras. Según el mandatario, el impacto de estos tributos en la recaudación es menor al 1%, no compensando el costo de su gestión ni la pérdida de confianza para los inversionistas.
Durante el anuncio Paz explicó que si bien el argumento para esos impuestos era redistribuir recursos de los sectores con mayores ingresos, no se cumplió esa expectativa. Para el nuevo gobierno, estas normativas provocaron un éxodo de capitales, con un estimado de alrededor de USD 7.000 millones que escaparon de la economía boliviana.
La medida se encuadra dentro del nuevo rumbo que propone Paz para el país, buscando el ingreso de recursos económicos, buscando aumentar la inversión extranjera en diversos sectores, incluyendo el de los juegos de azar.