La Cámara de Diputados de Brasil aprobó el proyecto de ley que regula las apuestas deportivas y ahora pasa al Senado

La Cámara de Diputados del Congreso de Brasil aprobó en el día de ayer, 13 de septiembre, el texto básico del Proyecto de Ley 3626/23, que regula las apuestas deportivas. Entre los principales cambios introducidos, se establece que la regulación también incluirá tanto a los otros juegos en línea como a los casinos virtuales, gravando los ingresos de las empresas de apuestas, los premios a los ganadores y además creará una subvención inicial para autorizar a los sitios web a operar legalmente.

Uno de los puntos más comentados en las discusiones entre los distintos actores del sector fue el impuesto sobre los ingresos de los sitios de apuestas que, a pesar de la intención del ponente Adolfo Viana de rebajarlo, se mantendrá en el 18%. La tasa inicial para autorizar el funcionamiento de los sitios será de BRL 30 millones (unos USD 6 millones), y éstos podrán operar durante 3 años. Los premios para particulares estarán gravados al 30%, incluida la inversión inicial, así como las ganancias. 

Adolfo Viana, ponente del Proyecto de Ley

El proyecto de ley, que ahora será analizado por el Senado, también establecerá una nueva distribución de ingresos, pago de tasas, requisitos y restricciones, respecto a lo presentado por el gobierno con la Medida Provisional de julio.

Se modifica la distribución de los ingresos recaudados entre las áreas gubernamentales. Seguridad social reducirá drásticamente su porcentaje, bajando del 10% a un 2%; mientras que el Ministerio de Deportes subirá del 3% al 4%.

El reparto entre los ministerios fue de vital importancia para la aprobación del texto, debido a que el gobierno de Lula da Silva logró el apoyo del bloque parlamentario del Centrão a partir de ceder el Ministerio de Deportes al diputado Silvio Costa Filho (Republicanos-PE), perteneciente a ese sector. Asimismo, Turismo, a cargo de otro diputado del Centrão, Celso Sabino, también será incluido en la distribución de fondos, como reclamó el propio ministro.

Celso Sabino, Ministro de Turismo

En resumen, en el texto aprobado por Diputados, el dinero recaudado con el impuesto sobre los ingresos de las empresas, el llamado GGR (Gross Gaming Revenue), se dividirá de la siguiente manera: 2% para la Seguridad Social; 1,82% para el Ministerio de Educación; 6,63% para el sector del deporte (4% para el Ministerio de Deportes y el resto para las confederaciones deportivas, a excepción de la CBF); 5% para el turismo (4% para el Ministerio de Turismo y un 1% para Embratur); y el 2,55% para el Fondo Nacional de Seguridad Pública.

Otro de los puntos establecidos por el proyecto de ley también estipula que las empresas de apuestas deben estar registradas en Brasil. "Sólo las personas jurídicas constituidas de conformidad con la legislación brasileña, con sede y administración en territorio nacional, que cumplan los requisitos de la reglamentación emitida por el Ministerio de Hacienda, podrán obtener autorización para operar apuestas de probabilidades fijas", dice el texto.

Respecto a las limitaciones, se establece la prohición de apostar a las siguientes personas: menores de dieciocho años; propietario, administrador, director, persona con influencia significativa, gerente o empleados del agente operador; agentes públicos con funciones directamente relacionadas con la regulación, control y supervisión de la actividad a nivel federal en la que ejerzan sus competencias; toda persona que tenga o pueda tener acceso a sistemas informatizados de lotería de probabilidades fijas; cualquier persona que tenga o pueda tener alguna influencia en el resultado de un acontecimiento deportivo real que sea objeto de una lotería de apuestas a probabilidades fijas, incluidos entrenadores, atletas y árbitros.