Los trabajadores de los casinos de la provincia argentina de Salta continúan su protesta para lograr la reapertura de los salones de juego locales. Hoy se movilizarán nuevamente a la Casa de Gobierno del barrio Grand Bourg y, por su parte, soltaron una dura advertencia: "no nos vamos a mover de acá hasta que nos atiendan".
No es la primera vez que hacen este tipo de planteo, ya que la semana pasada durante una movilización prometieron lo mismo, y aunque fueron atendidos no lograron mayores avances: "Nos recibieron, propusieron gestiones y no tenemos novedades y mucho menos fecha de apertura", explicó una de las manifestantes, según registró Voces Críticas.
La situación económica y laboral de los trabajadores de casinos de Salta no deja espacio para las especulaciones de ningún tipo: 800 familias llevan dos meses sin cobrar ni un mínimo de su salario y los establecimientos en los que trabajan no pueden facturar, y por ende, pagarles parte de su sueldo.
El Comité Operativo de Emergencia de la provincia sigue sin darle entidad al reclamo de los trabajadores. Ellos presentaron estudios y propuestas sanitarias que minimicen el riesgo de contagios. Su protesta se acentúa cuando se repasa la realidad de los distintos rubros comerciales. "Abrieron las ferias barriales, donde no tienen ni el 5% del protocolo que tenemos nosotros, que nos exigen muchísimas cosas. Somos monitoreados todo el tiempo por cámaras para que se cumpla todo y no nos quieren habilitar. Necesitamos una respuesta ya, porque esto se fue de las manos", manifestó la semana pasada la representante sindical de los empleados del casino Lucky, Lorena Muñizaga.
Los trabajadores del juego salteño ya adelantaron que aunque el 25 finalice el decreto que los priva de funcionar, convocaron a una reunión tipo plenaria para el 29 de junio para poder ordenarse y ver cómo continúa el conflicto.