Por la operación de las 47 máquinas retiradas se dejan de recaudar aproximadamente 117 millones de pesos al año por concepto de derechos de explotación que se hubiesen destinado al financiamiento del sistema de salud en Colombia.
Jaime Cardona, presidente (E) de Coljuegos, afirmó que gracias al trabajo en equipo con la Policía Nacional se logró este importante “golpe” a la ilegalidad en Cali. Sin embargo, manifestó su preocupación sobre la predominación de juegos ilegales y espera contar con el apoyo de las autoridades competentes en cada región para combatir este flagelo que afecta los recursos para la salud de los colombianos.
Los implicados en la operación ilegal detectada serán sancionados con 55 millones de pesos por máquina retirada y pueden enfrentar prisión de seis a ocho años.