El hecho de hacer cumplir las reglas en un plazo de dos meses podría fijar un gravamen no razonable sobre los reguladores y la industria de los servicios financieros en un momento de crisis económica, dijeron los legisladores, en una carta al Departamento del Tesoro y la Reserva Federal.
El proyecto, que le ha costado a las empresas de juego por internet de Europa miles de millones de euros, impide que las empresas acepten tarjetas de crédito, cheques y pagos de transferencia de fondos electrónicos en conexión con cualquier juego por Internet ilegal.
El congreso pasó la legislación en contra del juego en 2006, cuando los republicanos todavía controlaban ambas cámaras: el senado y diputados. Sin embargo, el proyecto
no definió qué tipos de juegos son ilegales. El Tesoro y la Reserva Federal expresaron preocupación hace un año de que estuvieron luchando por entender exactamente qué era lo ilegal. Por ejemplo, el proyecto todavía permitía las apuestas de carreras de caballos online bajo el Acta de Carreras de Caballos Interestatal de 1978.
El grupo liderado por Barney Frank, el Comité de Servicios Financieros de los Estados Unidos, dijo en una carta que la ley que hace cumplir las reglas tiene defectos, y dijo que pretendía sacar la legislación que oficialmente demoraría las reglas hasta diciembre de 2010. “También creemos que este es un gravamen no razonable para los reguladores y para la industria de servicios financiera en un momento de crisis económica”, dijo la carta, firmada por 19 legisladores.