Los ediles de la CPI de las tragamonedas estiman que existen hoy cerca de 210 mil máquinas funcionando en toda la ciudad, dentro y fuera de bingos, la mayoría en situación irregular, sin pagar impuestos.
Según el secretario municipal de Finanzas, Luiz Fernando Gusmaão Wellisch, actualmente existen 394 bingos inscriptos en la capital, De estos, 200 ya sufrieron algún tipo de fiscalización. Ya el secretario de Municipalidades, Andrea Matarazzo, informó que hay 176 salas debidamente constituidas hoy en día., de las cuales 33 funcionan con acciones de amparo. El resto ya fue clausurado o está en vías de serlo.
Ante los ediles de la CPI, Matarazzo afirmó que es imposible fiscalizar todos los locales que tienen máquinas tragamonedas. Según él, cerca del 80% de los bares y restaurantes cuento con por lo menos una de esas máquinas. La estimativa de la Intendencia es la de que existan cerca de 350 mil de estos establecimientos en la ciudad. La Secretaria de Municipalidades cuenta con 700 fiscales.
Por cada máquina la Municipalidad debería recibir R$ 124,16 (U$S 61,2) de Impuestos Sobre Servicios (ISS). En 2006, el municipio recaudó R$ 14,3 millones (U$S 7.057.651), cerca del 40% más que en 2005, cuando entraron en las arcas R$ 10,1 millones (U$S 4.984.774).
El pasado martes, 14 bingos fueron cerrados en la ciudad, en los barrios Capela do Socorro, Perus, Santo Amaro, Vila Mariana y Vila Prudente. La prohibición es hecha en base al decreto municipal de abril de 2006 que prohíbe bingos en la capital. Sólo pueden funcionar aquellos que tienen amparos contra esa legislación municipal.