El Interventor del Instituto de Lotería y Casinos de la provincia de Buenos Aires, Franco La Porta, se refirió a la intención de algunos municipios de restringir el horario de las salas de bingo, y dijo que es un tema que debe ser consensuado con el organismo provincial, para que esta medida no termine teniendo efectos indeseados en vez de beneficios. “El Instituto de Lotería es el que tiene la información pormenorizada de la problemática en cada zona, a raíz de la implementación de un programa de asistencia al juego compulsivo, que cuenta con los datos necesarios para evaluar la situación", señaló.
El Programa de Prevención y Asistencia al Juego Compulsivo se lanzó en septiembre del año pasado, y cuenta con una línea gratuita (0800-444-4000) y cuatro Centros de Asistencia, en los que ya se han atendido alrededor de 250 personas. En una segunda y tercer etapa, se comenzará a capacitar al personal para detectar a aquellos jugadores que sufren la patología y posteriormente con los datos evaluados, se tomarán las medidas institucionales necesarias, como la restricción horaria, las distancias entre las salas, la evaluación de los juegos que afectan en mayor medida.
Por otra parte, el titular de Lotería manifestó: "La decisión de restringir el horario, no debe ir en contra de la ley provincial 13.063, que obliga a las salas de bingos a contratar una cantidad predeterminada de empleados, y por lo tanto se debe evaluar que la medida no afecte la situación laboral de los trabajadores".
Por último, La Porta hizo hincapié en la necesidad de concensuar la medida, "para que realmente sea un elemento que sirva para cuidar la salud de los habitantes, y no termine siendo una causal de despido de personal o de proliferación de lugares de juego clandestino como así tampoco un factor de disminución de la recaudación, que sostiene con estos ingresos, los programas sociales provinciales y deriva los fondos a seguridad, educación, salud, trasplantes y municipios".