Cecilia Valdés: “Esperamos que 2026 sea el año en que Chile cuente con una regulación integral del juego”

La presidenta ejecutiva de la Asociación Chilena de Casinos de Juego (ACCJ), Cecilia Valdés, destacó el 2025 como un año en el que la industria del juego en dicho país avanzó “en posicionamiento, en rigor técnico y en diálogo institucional”.

En entrevista con Yogonet, Valdés saludó los efectos del fallo de la Corte suprema que declaró ilegales a las plataformas del juego online que operaban sin autorización y dijo esperar que el próximo año se alcancen los consensos necesarios para definir un marco regulatorio para el iGaming.

A partir de ello, consideró que la llegada del nuevo gobierno de José Antonio Kast podría abrir el camino para retomar la discusión legislativa del proyecto, que permanece actualmente en la Cámara de Diputados.

¿Cuál es el balance del 2025 para la ACCJ?

El 2025 fue un año desafiante para la industria del juego regulado. Hubo avances relevantes, aunque todavía insuficientes para alcanzar el estándar de modernidad que Chile necesita. Vimos progresos en la instalación del debate sobre la ilegalidad del juego online, un fortalecimiento del trabajo conjunto con municipios y autoridades, y una mayor visibilización del aporte que realizan los casinos presenciales en desarrollo regional, empleo formal y recaudación fiscal.

También conseguimos posicionar con más fuerza la urgencia de una regulación moderna, simétrica y aplicable, que proteja efectivamente a los usuarios y distinga con claridad a la industria formal de un mercado ilegal que sigue creciendo a gran velocidad. Sin embargo, aún falta mayor decisión política, más tiempo y prioridad en la agenda del Legislativo para impulsar una transformación regulatoria de fondo que permita contar con una industria robusta, competitiva y plenamente alineada con estándares internacionales.

Nuestro balance es positivo: avanzamos en posicionamiento, en rigor técnico y en diálogo institucional. Pero el desafío sigue abierto y requiere un compromiso más decidido para que la regulación avance al ritmo que el país y los usuarios demandan.

¿Qué noticia o evento de la industria del juego le parece la más importante del año y por qué?

Sin duda, el hecho más relevante del año fue el lanzamiento del estudio Pantallas que Atrapan, desarrollado por la Corporación de Juego Responsable de la cual somos socios como ACCJ. Por primera vez en Chile contamos con evidencia sistematizada sobre cómo niños, niñas, adolescentes y jóvenes están siendo expuestos —muchas veces sin supervisión— a contenidos, influencers y dinámicas vinculadas al juego online en redes sociales y plataformas digitales.

Este estudio no sólo abrió un debate urgente sobre bienestar digital, protección de menores y nuevas formas de publicidad encubierta, sino que también posicionó a la industria regulada como un actor proactivo en materia de prevención y juego responsable. Para nosotros, fue un hito porque permitió poner datos concretos donde antes había solo intuiciones y alertas dispersas.

En segundo lugar, el fallo de la Corte Suprema que reafirmó la ilegalidad de las plataformas de apuestas online en Chile marcó otro hito relevante en la discusión pública. Ese dictamen dejó en evidencia la urgencia de contar con una ley clara, moderna y aplicable; y reforzó la necesidad de fortalecer las herramientas de persecución penal y administrativa para proteger a los usuarios. Ratificó, además, algo que la ACCJ ha advertido desde hace años: sin regulación, los vacíos los llena la informalidad.

¿Qué expectativas tiene la asociación de cara al 2026?

Esperamos que 2026 sea el año en que Chile finalmente cuente con una regulación integral de la industria del juego. Como ACCJ, confiamos en que el nuevo ciclo político abra la puerta a un debate técnico, equilibrado y basado en evidencia. Nuestro foco estará en tres ejes: simetría regulatoria entre el mundo físico y digital; protección a los consumidores, especialmente jóvenes y menores; y fortalecimiento del rol fiscalizador del Estado. Aspiramos a una industria moderna, transparente, con reglas claras y que conviva bajo un mismo estándar, tanto en el mundo presencial como en el digital.

La discusión legislativa sobre la regulación del juego online se vio frenada en 2025. ¿Qué se puede esperar con el nuevo gobierno?

Con la llegada de un nuevo gobierno, debiera abrirse una oportunidad para retomar el proyecto con sentido de urgencia. Hoy existe consenso transversal sobre la necesidad de regular: por razones de seguridad, de salud pública, de recaudación y por, sobre todo, por la protección que requieren niños, niñas y adolescentes. Esperamos que el Ejecutivo priorice este tema dentro de su agenda económica y de seguridad, porque la ausencia de regulación solo ha fortalecido al mercado ilegal. Como ACCJ, estamos disponibles para aportar datos, experiencia regulatoria y propuestas que aseguren una ley moderna, equitativa y eficaz.