Durante una entrevista en vivo del diario O Tempo, el ministro de Turismo, Marcelo Álvaro Antônio, fue tomado por sorpresa con la pregunta sobre la legalización de los casinos, y adelantó que el tema de la legalización de las salas de juego en resorts integrados “no es una política oficial del Gobierno ni del presidente Jair Bolsonaro”. “Es un proyecto que está siendo construido en el ámbito del Ministerio de Turismo, para posteriormente ser presentado al presidente”, aclaró.
De acuerdo a lo señalado en su análisis de la situación por Magnho José, periodista especializado y presidente del Instituto de Juego Legal de Brasil, el ministro también informó que los casinos resorts ayudan a subsidiar a otras actividades de estos resorts: “por ejemplo, es posible conseguir tarifas más baratas en los resorts de altísimo nivel, de seis estrellas. La gente consigue subsidiar las demás actividades del complejo a través del casino, ofreciendo a las personas que se disponene a contratar un paquete turístico en un resort, mejores tarifas. Entonces esa es la idea. Que la gente siga el ejemplo de Japón y Singapur, que tenía prácticamente dos millones de visitantes al año y pasó a tener casi 30 millones. Nosotros tenemos muchos casos internacionales de éxito de casinos integrados a resorts”, comentó Álvaro Atonio.
Un riesgo para el sector hotelero
Según el titular del IJL, el ministro de Turismo confirmó que la legalización del juego dentro de los IRs podría generar una fuerte crisis en la débil ocupación de los actuales hoteles. Los casinos resorts integrados representarían miles de cuartos con hospedajes subsidiados por la recaudación del juego.
“Además, el ministro de Turismo defiende los modelos adoptados por Japón o Singapur, que representa crear el monopolio del juego en Brasil a favor del modelo ‘casinos-resorts integrados’ (IRs) y entregarlo a las grandes corporaciones norteamericanas, en especial representadas por el Grupo Las Vegas Sands del billonario Sheldon Adelson”.
“El ministro también informó sobre la necesidad de debatir este tema dentro del Parlamento brasileño y defiende que esta discusión sea extendida a la “Policía Federal, el Ministerio Público, la Reserva Federal, los organismos de control como la CGU para que la gente pueda realmente construir un proyecto que va a eliminar cualquier tipo de ilícito y que, ciertamente, puede ser muy positivo para Brasil”.
Regiones con bajo IDH
“La opción de colocar en regiones brasileñas con un bajo IDH es una alternativa defendida también por el Ministerio de Turismo. Nosotros podemos dar un ejemplo aquí, en el Nordeste del país. Creo que llegó el momento del Nordeste, de vivir con una muleta como la asistencia social. Tengo la seguridad de que las familias del Nordeste quieren empleo, renta, y tener la dignidad de llevar su pan a casa. Por lo tanto, defendemos que sea en regiones con menos IDH”, sugirió Marcelo Álvaro Antônio. Pero los representantes de los IRs ya manifestaron que desean invertir en la implementación de unos pocos emprendimientos en Brasil y, preferencialmente, en Río de Janeiro, São Paulo y Brasilia. Además, los ejecutivos de los casinos defienden la criminalización de las dem{as modalidades de juego, aseguró Magnho José.
Según Marcelo Álvaro Antônio, la discusión sobre la legalización de los casinos quedó paralizada con la pandemia de coronavirus, pero tras este período el Ministerio de Turismo pretende retomar los estudios para presentar una nueva propuesta que sea viable para el presidente de la República, y discutir el tema en el Congreso Nacional, con las bancadas contrarias a la legalización de los casinos.
“Sobre los casinos resorts: su impacto económico, los empleos, los tributos, todos esos temas tienen estudios en desarrollo. Ahora ello toma un mayor cuerpo junto al Ministerio, para ser presentado a la Presidencia de la República y al Congreso Nacional con un proyecto que realmente sea viable. Claro que el presidente Bolsonaro tiene una gran preocupación en no afectar a las familias brasileñas. Y este proyecto, debatido con la Cámara de Diputados y el Senado Federal, con la bancada evangélica, con la bancada católica, permitirá a la gente tener un modelo con todo mucho más claro y que no habrá ningún tipo de impacto en el pan que el asalariado brasileño lleva a su familia. Entonces ahora yo no puedo responder sobre estas cuestiones de impacto tributario y económico, porque son temas que aún están siendo analizados con estudios dentro del ministerio”, aseguró el ministro.
Lo mejor para Brasil
Magnho José es categórico en sus consideraciones: “No me canso de repetir que lo mejor para Brasil es la aprobación del Marco Regulatorio del Juego, a través del proyecto substitutivo al PL 442/91, que contempla la legalización de todas as modalidades de juego”.
“Sólo la legalización de toda la demanda del mercado permitirá al Estado controlar, recopilar y depurar esta actividad en el país. Todo lo que va por fuera de ello, es una invención de media docena de actores políticos que desean crear un monopolio sobre los juegos de azar para las corporaciones norteamericanas, al legalizar solo complejos turísticos integrados con casinos”, finalizó.