El viernes pasado se cumplía la prórroga que el juez de Instrucción Oscar Balmes había impuesto en el expediente. Es por esto que se realizó una audiencia donde se definió la situación procesal de los seis imputados por peculado, quienes ya habían solicitado volver a la calle.
El magistrado decidió otorgarles la libertad previo pago de una fianza de 150.000 pesos (aproximadamente 9.700 dólares) a cinco de los seis acusados, uno de los cuales, el tesorero de la entidad, estaba en prisión domiciliaria por motivos familiares. La decisión se basó en que el mínimo de la escala penal para ese tipo de delitos es de dos años, por lo que los acusados podrían acceder a una pena condicional en caso de ser hallado culpables en un futuro juicio.
Con respecto al sospechoso restante, un empleado de la empresa Betec que colaboraba en el recuento de fichas, el juez la dictó la falta de mérito y quedó desligado de la investigación penal, según detallaron fuentes ligadas al caso.
En la audiencia también surgió un dato que no es menor. La defensa del policía que está vinculado, quien cumplía servicios extraordinarios en la sucursal al momento del hecho, apuntó contra el jefe del Casino de Mendoza de Tupungato, Alejandro Grillo, quien ahora es probable que comience a ser indagado.
Al expediente le resta un informe de Policía Científica sobre las huellas dactilares que se encontraron en la escena del hecho y el análisis de las cámaras de seguridad del lugar, pese a que dejaron de funcionar ya que fueron desconectadas durante el robo.
El millonario hurto tuvo lugar entre las 4 y las 10 del 29 de marzo, cuando el establecimiento cerró sus puertas al público. El contador llegó a las 9.45, antes de reabrir la atención a los jugadores, y notó el faltante de dinero de la recaudación. Precisamente fueron 3.002.800 de pesos los sustraídos. Días después, el casino cerró sus puertas para siempre, tal como estaba previsto.
Un policía y personal de seguridad privada vigilaban la única puerta de acceso, por lo que se puso la sospecha sobre los empleados. Fueron detenidos e imputados el tesorero de la sucursal, dos administrativos, dos guardias de seguridad privada y un policía que cumplía servicios extraordinarios.