"Hoy fuimos a hacer el procedimiento para verificar el estado de las cuentas del casino, pero la empresa no nos permitió entrar, lo que es un agravante a su situación. Es una de nuestras atribuciones (controlar). Es una desobediencia grave, vamos a pedir auxilio a la Justicia", informó la titular del Instituto Provincial de Juegos y Casinos, Josefina Canale, tras declarar el cierre por diez días del Casino Cóndor del Hotel Intercontinental de Mendoza.
De acuerdo con los datos del IPJyC, la deuda de KLP Entretenimientos con el Estado mendocino incluye 170.489 dólares ($2,5 millones) de impuesto inmobiliario, 1.568.500 dólares ($23 millones) de ingresos brutos, 102.293 dólares ($1,5 millones) de tasa de fiscalización y 190.948 dólares ($2,8 millones) de impuesto solidario educativo. Aunque desde la entidad indican que el mayor agravante es que el casino se encuentra en concurso de quiebra.
En esta línea, Canale declaró que la empresa tiene diez días para justificar las irregularidades en su contabilidad, y de no cumplir con las intimaciones ya anticipó que se proseguirá con el cierre definitivo del casino.
En esta línea, desde el Gobierno anunciaron que intimarán a todos los complejos de apuestas que mantengan deuda con el Estado. Según el informe del primer trimestre de la Ley de Responsabilidad Fiscal, entre los 6 primeros deudores de Ingresos Brutos, hay 4 casinos: la empresa KLP, con una deuda de 1.270.420 dólares ($18.629.110); "Hotelera Emprender", que tiene a su cargo el casino del Hotel Tower de San Rafael, debe 1.180.750 dólares ($17.314.121); "Desarrollos Maipú", la empresa del casino del hotel Arena Maipú debe pagar al Estado 739.580 dólares ($10.844.975); y, por último, aparece CELA, que explota el casino del hotel Sheraton y que arrastraba una deuda por el canon de inspección no pagado en el 2009.
Tras conocer la noticia, el Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (Aleara) emitió un comunicado en el que se declara en "estado de alerta y movilización". "Más allá de las cuestiones administrativas o burocráticas que deban resolverse entre el Instituto de Juegos y Casinos y la empresa concesionaria, advertimos que no estamos dispuestos a sufrir la pérdida de días de trabajo o fuentes laborales", sentenció Ariel Fassione, secretario gremial de Aleara.
Informó que en el Casino Cóndor trabajan cerca de 250 empleados de juegos "que de ninguna manera pueden ser víctimas o rehenes de una situación ajena provocada por diferencias entre la empresa y el organismo encargado de su control"