La FFT presentó una demanda encaminada a que se prohíban las apuestas por Internet relacionadas con el torneo de Roland Garros con el argumento de que pueden convertirse en un incentivo para “arreglar” los encuentros, sobre todo entre rivales de muy diferente nivel.
El tribunal de Lieja que se encarga de tramitar este tipo de demandas por vía de urgencia celebró la primera audiencia del caso y ha fijado el calendario posterior. El 8 de abril la FFT y las compañías demandadas presentarán sus argumentos y el 11 de abril se celebrará la vista en el procedimiento de urgencia.
El tribunal de Lieja tendrá que pronunciarse sobre la causa antes del 25 de mayo de 2008, fecha en que comenzará el torneo sobre polvo de ladrillo en la capital francesa.
Los responsables del prestigioso torneo temen que la generalización de apuestas en Internet sobre el resultado de los partidos, el número de sets o de puntos ganadores genere un “clima de descrédito”, que se contagiaría, advierten, a otras competiciones de tenis y al deporte en general.
Los abogados de la Federación de Tenis también acusan a las compañías de apuestas de comportarse como “parásitos”, ya que se benefician del renombre internacional de los grandes torneos de tenis sin pagar nada a cambio.
El portavoz de la casa de apuestas británica Ladbrokes y presidente de la Unión de agencias de apuestas belgas, Alain Dhooghe, se defendió asegurando que estas sociedades no tienen “interés alguno” en amañar los resultados.
Dhooghe hizo hincapié en la honradez de las casas de apuestas deportivas, que viven "gracias al deporte, pero sólo si las reglas son respetadas".