El ministro de Turismo, Celso Sabino (União Brasil), está a punto de abandonar el Gobierno de Lula (PT). Según informó Agencia Brasil, ya ha comunicado que dejará el cargo después de que el presidente regrese de su viaje a la Asamblea de las Naciones Unidas (ONU), el jueves 25 de septiembre.
El motivo de la salida de Sabino está relacionado con la presión ejercida por União Brasil. El partido determinó que todos sus miembros abandonaran sus cargos en el Gobierno federal. A pesar de tener cargos en la administración de Lula, el partido nunca asumió una posición oficial a favor del gobierno, y varios parlamentarios votaron en contra de las agendas gubernamentales en el Congreso. Al exigir que sus afiliados dejen sus cargos en la administración federal, el partido refuerza su distanciamiento de Lula en un momento en el que las articulaciones para las elecciones de 2026 están cobrando fuerza.
En el gobierno, Sabino fue un gran defensor de la legalización de los casinos como forma de estimular el turismo, generar empleos y aumentar la recaudación fiscal. En más de una ocasión, manifestó su apoyo al proyecto de ley (PL) 2.234/2022, que busca permitir la operación de juegos físicos en Brasil.
En 2024, por ejemplo, afirmó que la iniciativa hará que Brasil se equipare a otros países que tienen resorts integrados con casinos. El ministro mencionó, en una entrevista con CNN, que muchos brasileños cruzan la frontera para jugar en Argentina, Paraguay y Uruguay, donde la actividad es legal.
"Solo un emprendimiento [resort integrado con casino] movilizará más de miles de millones de reales para su implementación. Pretendemos tener al menos uno en cada estado de la federación. Habrá estados que podrán tener más de uno, dada su extensión territorial y también su población. Estos proyectos marcarán la historia del turismo brasileño. Estos esfuerzos del gobierno federal, sumados a la aprobación de este proyecto, llevarán al turismo brasileño a otro nivel", declaró Sabino en aquel momento.
Cabe recordar que hubo dos intentos de votar el PL 2.234/22 en el pleno del Senado en 2024 y 2025, pero el tema acabó retirándose de la agenda debido al riesgo de derrota y a la presión contraria de los parlamentarios, especialmente los vinculados a la bancada evangélica. Hasta el momento, no hay una nueva fecha prevista para la votación del proyecto que, además de los casinos, también autoriza los bingos y las apuestas físicas.