El proyecto de ley para legalizar las apuestas deportivas de evento único pasó al Senado de Canadá, luego del tercer debate y de la aprobación por parte de los legisladores en la Cámara de los Comunes la semana pasada.
El objetivo del proyecto (C-218) es modificar las disposiciones sobre juego establecidas en el Código Penal para regular las apuestas en persona y en línea en partidos individuales de fútbol, hockey y otros, que actualmente son ilegales, con la excepción de las carreras de caballos, según Yahoo Finance.
En un informe reciente de Deloitte Canada, se establece que, en un plazo de cinco años a partir de la legalización, las apuestas deportivas canadienses podrían crecer de US$ 500 a US$ 28 mil millones en el mercado legal. Además, se prevé que podría impulsar el crecimiento más allá de las compañías de apuestas, como las áreas de TI, telecomunicaciones, medios y pago seguro.
El avance de C-218 ha generado inversiones en compañías canadienses con el fin de captar una base más grande de jugadores de apuestas deportivas. Compañías como Score Media and Gaming, Bragg Gaming Group y FansUnite Entertainment han registrado un aumento de sus acciones ante la esperanza de que el mercado de apuestas legales de Canadá experimente el rápido crecimiento visto en los Estados Unidos luego de las reformas de 2018.
"Ahora que el proyecto C-218 fue aprobado por la Cámara, esperamos que el Senado también lo apruebe", señaló el director ejecutivo de Score Media and Gaming, John Levy.
Sobre la base de datos históricos del mercado de juego en línea legal en los EE. UU. y en el mundo, Score Media estima que el mercado de juego en línea en Canadá puede generar entre US$ 3,8 mil millones y US$ 5,4 mil millones en concepto de ingresos brutos del juego.
El miembro del Parlamento del Partido Conservador de Saskatchewan, Kevin Waugh, quien apoyó el proyecto C-218 como proyecto de un miembro privado, les dijo lo siguiente a los miembros de la Cámara: "Este proyecto tiene el potencial de generar nuevas oportunidades de crecimiento. Les daría a las autoridades provinciales jurisdicción plena para las apuestas de evento único, lo que reduciría las apuestas ilegales y generaría ingresos para la industria deportiva y el Gobierno".
Muchos casinos de Canadá están a muy poca distancia de sus competidores de los EE. UU, donde apostar en eventos deportivos individuales en persona es legal. Por ello, la industria de casinos también se beneficiaría. Una actividad que, debido a la pandemia de COVID-19, ha sufrido fuertes pérdidas.