La tesorera de la asociación de fomento del Barrio Hipódromo de Mar del Plata, Mónica Felices, relató en Radio Brisas la situación en la que se encuentra el predio de 73 hectáreas y destacó que "la pista la mantuvo siempre la gente del turf, con un sacrificio enorme". Además, explicó que "si el gobierno de la provincia de Buenos Aires no tiene interés en explotarlo, tendría que abrir una licitación y que lo pueda hacer un privado", para poder recuperar la actividad en el lugar, que no funciona desde hace casi 15 años.
"Tenemos la tristeza de siempre de que los gobernantes no entiendan que es una fuente laboral importantísima. La gente que esta en el turf en el barrio está haciendo un sacrficio tremendo desde hace años, porque desde que cerraron el Hipódromo tienen menos caballos para cuidar y eso a la economía de las familias les hace daño", detalló la vecina, y agregó que "cuando hay que correr, hay que viajar a La Plata, Palermo, San Isidro o Tandil, porque no se puede correr más en Mar del Plata, y los gastos para llevar los animales y las personas que viajan con ellos son muy grandes".
El testimonio radial de Felices, describe a la perfección la realidad que debe vivir el sector del turf por la falta de voluntad de reactivar la industria en la zona. Y abre un debate respecto al funcionamiento, más allá de que sea público, privado o mixto, porque atribuye que lo único que impidió el abandono del lugar fue el esfuerzo de la gente del turf. "Han tratado de sobrevivir y subsistir todo este tiempo con las esperanza de que algún gobernante entienda que ese predio, que tiene la mejor cancha del país, tiene que ser habilitado", dijo Felices.
La demanda está vigente y la respuesta pendiente. "Hasta ahora la pista está y ese predio no puede tener otro fin que ser un Hipódromo para la ciudad de Mar del Plata, por las características que tiene", concluyó la tesorera.