El Primer Ministro del Reino Unido, Boris Johnson, anunció el lunes que Inglaterra ingresó a su tercera etapa de confinamiento a partir de la medianoche del martes hasta, al menos, el 15 de febrero; lo cual implica el cierre de la industria física del juego. La medida forma parte del esfuerzo para contener la nueva cepa de la COVID-19 que es altamente contagiosa.
Las personas solo pueden salir de sus casas para comprar elementos esenciales, trabajar si no pueden hacerlo desde casa, hacer ejercicio, ir al médico, o escapar de violencia doméstica, dijo. Las autoridades de la salud del Reino Unido recomendaron que el país pasara a la fase 5 de alerta, argumentando que si el país no toma medidas, la capacidad del Sistema Nacional de Salud podría “estar sobrepasada en 21 días”, dijo Johnson.
Los cambios llegan en un momento en que el Reino Unido se enfrenta a una variante más contagiosa de la COVID-19. A la fecha, el país ha registrado más de 2,6 millones de casos de coronavirus y más de 75.000 muertes por la enfermedad, de acuerdo con datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins.
Las estrictas nuevas restricciones van a ser similares a las del primer confinamiento en marzo del año pasado, por lo que va a forzar a cerrar a docenas de los negocios que siguen abiertos bajo el actual sistema de grados. La lista de los negocios que deberán cerrar incluye a establecimientos de entretenimiento como casinos, salones de bingo, casas de apuestas, arcades, teatros, salas de conciertos, cines, museos, galerías, salas de bolos, pistas de patinaje, locales de kartings, centros de juego interior y áreas de actividades físicas como parques inflables y centros de trampolín, circos, parques de atracciones, ferias, parques acuáticos y temáticos.
El lunes a la tarde, el Primer Ministro escocés, Nicola Sturgeon, anunció una nueva orden de quedarse en casa para los ciudadanos del país desde la medianoche. Irlanda del Norte y Gales ya habían instalado restricciones.
Las carreras continúan en el Reino Unido
La Autoridad Británica de Carreras de Caballos (BHA, por su sigla en inglés) confirmó poco después del anuncio de Johnson que las carreras van a continuar sin fans y solo con la presencia del personal esencial.
El comunicado de la BHA decía: “Luego del anuncio de esta noche, podemos confirmar que las carreras van a continuar a puertas cerradas durante el próximo confinamiento nacional. La presencia se va a limitar al personal esencial para montar el evento y se va a continuar requiriendo a todos los presentes que cumplan estrictamente con los protocolos británicos contra la COVID-19”.
La autoridad escocesa de carreras, que representa a Ayr, Hamilton Park, Kelso, Musselburgh y Perth, tuiteó: “Luego del anuncio de hoy sobre el regreso de las restricciones totales en Escocia por la Covid, @ScotGov ha confirmado que las carreras en Escocia pueden continuar a puertas cerradas. Solo pueden asistir las personas esenciales para montar los eventos, quienes deberán seguir estrictamente los protocolos existentes. Desafortunadamente, los propietarios no podrán asistir a las carreras hasta nuevo aviso”.