En enero de 2013, los cuatro casinos que operaban en Chiapas, dos en Tuxtla Gutiérrez y dos en Tapachula, fueron clausurados por la entonces Procuraduría de Justicia del Estado por incumplir medidas de seguridad.
De los cuatro, HD Games en Tapachula y Emotion en Tuxtla, se retiraron por completo de la jurisdicción. Por su parte, Bingo 777, que inició operaciones en 2006, y Casino Central, mantuvieron las instalaciones durante seis años mientras enfrentaban el proceso legal. El segundo sigue cerrado en Tapachula.
"El gobierno anterior no nos dejó operar, y con este hay una negociación", comentó un trabajador del negocio ubicado sobre el Boulevard Belisario Domínguez, citado por la agencia Reforma. Según otro empleado, el casino del Grupo Codere estuvo lleno durante el fin de semana pasado, en especial por las noches.
Fuentes oficiales indicaron que aunque el argumento fue incumplimiento a diversas normas, la autoridad cerró esos negocios por los niveles de endeudamiento que ya enfrentaban algunos apostadores, entre ellos servidores públicos y empresarios. Además temían que por su ubicación fronteriza con Guatemala, los casinos atrajeran actividades delictivas.