El presidente de Perú y el MEF defienden el ISC a casinos y tragamonedas

El presidente de la República de Perú, Martín Vizcarra, declaró que ve con preocupación cómo la Comisión de Constitución del Congreso votó a favor de derogar el Decreto Legislativo (DL) 1419, el cual plantea aplicar el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a los casinos y tragamonedas desde el próximo año.

"Vemos con preocupación (la posible derogación) de uno de los DL que elaboró el Ejecutivo, donde se establece el selectivo al consumo de los casinos y tragamonedas, pese a que tuvimos enorme oposición de precisamente de los dueños de casinos y tragamonedas", señaló el presidente.

El voto de la comisión mencionada se basó en el informe aprobado el martes pasado, elaborado por un grupo de trabajo, que se encargan de revisar la constitucionalidad de los DL emitidos por el Poder Ejecutivo. Éste señala que la medida que entraría en vigencia desde el 1 de enero del 2019 excedió la delegación de facultades otorgada por el Congreso, dado que el ISC a los casinos y tragamonedas se aplica directamente a los negocios, y no se traslada a los usuarios.

Esto iría en contra de la naturaleza del este tipo de impuesto, que debe gravar indirectamente a los usuarios. Sin embargo, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) asegura que el ISC sí puede trasladarse al consumidor final, reduciendo la tasa de retorno del jugador.

En ese sentido, Vizcarra espera que el Pleno del Congreso corrija la aprobación del informe. "Esas señales son las que esperamos que el Congreso pueda corregir buscando siempre ese trabajo articulado de todos los poderes del Estado buscando un desarrollo", añadió. La Comisión de Economía ya se pronunció en contra de la derogación.

Respuesta del Ministerio de Economía y Finanzas al grupo de trabajo

Este jueves, el MEF respondió en detalle a cada uno de los cuestionamientos mediante un comunicado de prensa, donde negó que el DL 1419 vulnere los parámetros de constitucionalidad, al enfatizar que es un impuesto selectivo al consumo del tipo específico (monto fijo) que sí puede trasladarse al consumidor final.

La cartera sostuvo que la implementación de este nuevo gravamen coloca en igualdad de condiciones a los distintos operadores de la industria del juego dado que, hasta antes de la norma que iniciaría su implementación el 1 de enero del 2019, los casinos y tragamonedas eran la única actividad que no se encontraba gravada con este impuesto.

El presidente del grupo de trabajo, Miguel Torres, destacó que de los tres tipos de impuestos que existen (a la propiedad, a las ganancias y al consumo), el DL 1419 grava las ganancias (como un impuesto a la renta) y la propiedad (como un impuesto predial). Esto se debería a que el DL grava en función al número de máquinas e ingresos.

Al respecto, el MEF explicó que no vulnera los parámetros de constitucionalidad establecidos en las sentencias del Tribunal Constitucional: "La medida fue emitida en el marco de las facultades delegadas por el Congreso, que autorizó al Poder Ejecutivo a gravar con ISC a los juegos de casino y máquinas tragamonedas, y se optó por aplicar uno de los métodos disponibles (ISC específico)".

Indicó que es un impuesto al consumo, porque grava la capacidad contributiva evidenciada cada vez que una persona juega y apuesta, es decir, el consumo de servicios de entretenimiento. Además, lo considera un impuesto selectivo al consumo del tipo específico (monto fijo). El ISC se determina aplicando un monto fijo sobre el ingreso neto de las mesas de casino y máquinas tragamonedas, según tres categorías que son determinadas por los ingresos netos de cada mesa o máquina, y esto permite que la carga impositiva sea la misma en cada categoría.

Asimismo, el MEF asegura que el ISC puede trasladarse al consumidor final. En la industria del juego, el mecanismo para trasladar el tributo sería la reducción de la tasa de retorno del jugador, que hoy supera el 90% del ingreso bruto (apuestas totales), pese a que la tasa de retorno mínima fijada por Ley es de 85%, por lo que los operadores de esta actividad tienen un espacio de al menos 5 puntos porcentuales del ingreso bruto para reducir la tasa de retorno sin ver perjudicada su rentabilidad.

"La reducción de la tasa de retorno puede lograrse a través de una reducción de los premios o un incremento del valor de la apuesta, lo cual disminuye el incentivo para jugar o lo vuelve más caro, en consecuencia, reduce la ludopatía y, por ende, la externalidad negativa de los juegos de azar", señaló la entidad.

Por último, el MEF sostiene que no es un impuesto a los ingresos ni al patrimonio, y argumenta además que otros países también gravan los casinos y máquinas tragamonedas con impuestos al consumo específico. Países como Chile y Colombia también gravan las actividades del sector del juego con impuestos especiales al consumo (ISC) de tipo específico (pesos por máquina), reconociendo la particularidad de las operaciones de la industria del juego que exige reglas especiales para la determinación de la base imponible.