La acusación federal alega que el casino Normandie, que opera desde la década del '40, omitió deliberadamente registrar y reportar una serie de transacciones en efectivo a gran escala en 2013.
“El casino, citan los fiscales federales, no registró la información de identidad de un jugador que ganó más de un millón de dólares en solo seis meses”. La ley federal exige a estos establecimientos mantener los datos personales (nombre, dirección, número de seguro social e información de contribuyente) de quienes ganan más de 10.000 dólares, en un período de 24 horas, para evitar el lavado de dinero.
El personal del establecimiento ayudó a que sus apostadores más valiosos ocultaran sus ganancias, mediante la fragmentación de grandes transacciones en cantidades menores, o haciendo una lista de “promotores de juegos independientes”, en lugar de usar los nombres reales de los jugadores.
Además, se les acusó de no examinar las transacciones en efectivos que aparentaban lavado de dinero. El viernes, Normandie Club, la asociación de opera al casino Normandie, aceptó declararse culpable de dos delitos graves: fallar en mantener un programa efectivo contra el lavado de dinero y conspirar para evitar la presentación de informes al Gobierno de grandes cantidades de efectivo de sus apostadores.
“Estados Unidos tiene una serie de leyes contra el lavado de dinero, destinadas a impedir que lo delincuentes utilicen el sistema financiero de Estados Unidos para el blanqueo de grandes cantidades de dinero generada por una actividad ilegal, como el narcotráfico y la trata de personas”, dijo Eileen Decker, fiscal federal, en un comunicado de prensa.
“Los casinos que no cumplan estas normas son particularmente vulnerables a los criminales, que tratan de ocultar dinero ilegal como ganancias de juego”, agregó la procuradora Decker.
Bajo el acuerdo de culpabilidad, el casino aceptó pagar una multa de medio millón de dólares por cada uno de los cargos en su contra, y 1,4 millones al Gobierno federal como castigo por no conservar los reportes y datos de sus clientes. En total desembolsará 2,4 millones por sus faltas. Los fiscales notificaron en agosto de 2014 al casino que lo estaban investigando.