Los comerciantes se reunieron para exigir que se retiren los minicasinos. Los vendedores amenazaron con quemar los minicasinos sino eran desalojados de uno de los pasillos de ese centro de abastos.
Los comerciantes informaron que algunos locales son rentados para la instalación de minicasinos, donde los niños son los principales clientes, quienes se vuelven adictos a las apuestas, al tiempo de informar que el reglamento de mercados prohíbe la renta de locales, ya que deben ser aprovechado por el usufructuario, es decir, por el locatario que debe ocuparlo y trabajarlo, pero no rentarlo.
Expresaron que la administración del mercado no autorizó la intromisión de los minicasinos y que desconocía todo lo relacionado a su instalación.
Señalaron que la Procuraduría General de la República es la encargada de vigilar y sancionar lo relacionado a los juegos de azar y quien ha tolerado la presencia de los minicasinos, ya que no han hecho ningún operativo para sancionar a los dueños.