De acuerdo a lo señalado por Merlo Talavera, sólo 25 mil máquinas se encuentran en salas de juego de permisionarios autorizados por la Segob, y las demás operan con acciones de amparo. Los grupos empresariales con mayor participación dentro del mercado legal son Caliente, Televisa, Cie y Pringsa.
La legisladora indicó que mientras las máquinas tragamonedas son “el desecho de los casinos norteamericanos, en México han proliferado a partir de 2005 por su costo reducido, facilidad de instalación y falta de una normatividad actualizada”.
“Durante los últimos años –destacó-, en diversos establecimientos se localizan las máquinas tragamonedas que, además de ser un negocio ilegal, propician apuestas entre los jóvenes”. Mencionó que uno de los problemas más serios del juego no autorizado es que hoy por hoy se pueden ver a niños depositando sus monedas en estos aparatos, que afectan a los sectores más vulnerables de la sociedad, sin que las autoridades tomen las medidas correspondientes para regularlos.
Denunció que hay en distintas partes del país establecimientos ilegales en que se hacen pasar como casas de videojuego o maquinitas para obtener los permisos de las autoridades municipales, cuando en realidad tienen instaladas máquinas tragamonedas.