El funcionario dijo que actuará en consonancia con denuncias recibidas por autoridades locales, entre ellos el gobernador político de Cortés, Gabriel García Ardón, quien se quejó que en San Pedro Sula proliferan por montones estos juegos.
Las salas de tragamonedas deben tener un permiso por cada máquina, que debe darse de acuerdo con la población que hay en cada ciudad o municipio.
"Los que no tengan permiso, vamos a ordenar su cierre", anunció Madrid.
Según el ministro, los juegos de azar "son negocios que viven del vicio, de las apuestas, de los juegos de la suerte y de otro tipo de cosas que causan adicción. Nos preocupa que hayan crecido".