Para una población de 7,5 millones de habitantes las cifras son más que halagadoras, destinando sus impuestos de forma íntegra al Fondo Social de Pensiones.
La tasa máxima es de un 80%, gravando los de clase "A" con un 40% sobre los primeros 20 millones de euros añadiendo un 0,5% sobre cada millón de euros adicional. Los de "B" tributan sobre un 40% en los primeros 10 millones de euros más un 0,5% por cada millón sumado.
La media de impuestos recaudados en 2007 fue del 61% sobre el total de ingresos brutos. Para robustecer las políticas de juego responsable el Gobierno exige a los operadores contribuir con 250.000 francos suizos a entidades sociales.