BetOnSports contaba con una planilla de casi 2.000 personas, en su mayoría jóvenes, y ocupaba los últimos tres pisos de un conocido centro comercial de la capital costarricense. Uno de los empleados, de 18 años, relató que los reunieron a la 1.30 de la tarde alrededor de la piscina para decirles que la firma debía cerrar debido a todo el problema en Estados Unidos.
El supervisor Ray Rodríguez les indicó que la empresa trató de evitar dicho paso, pero que nada se podía hacer ahora. El empleado y su colega de trabajo se ocupaban de tomar apuestas vía teléfono o Internet. El abogado de BOS en Costa Rica, Francisco Conejo, confirmó la noche del jueves que cerraban debido a la orden judicial emitida en Estados Unidos.
Los rumores de cierre cobraron fuerza esta semana, sobre todo por la baja de llamadas, pues lo normal era que cada empleado atendiera unas tres llamadas de apostadores por hora, pero el lunes, por ejemplo, solo se atendió tres en todo el día. Aunque se desconoce el número exacto de empresas de ese tipo que operan en Costa Rica, se estima que dan unos 8.000 empleos. Una de las más grandes era BOS.