”Esperamos trabajar junto a Antigua y Barbuda para discutir este asunto y llegar a un acuerdo entre ambas partes”, comentó el vocero de la Oficina de Comercio de los Estados Unidos, Richard Mills.
La pequeña isla de Antigua y Barbuda recusó con éxito la prohibición impuesta en su momento por Estados Unidos sobre todo lo vinculado al juego por Internet. En ese momento, la administración de Bush apeló dicha medida ante la OMC. Las autoridades de la isla argumentaron que la prohibición existente para que los estadounidenses no pudieran apostar ni siquiera en sitios online fuera del país afectaba las actividades comerciales de Antigua.
Llegado el momento, el panel de la OMC encontró que la prohibición impuesta por Estados Unidos sobre apuestas por Internet, teléfonos y otras formas de juego remotas violaban los tratados de comercio del propio país. Mientras el mismo panel de la OMC entendió que las prohibiciones apuntaban a proteger a su población, determinó que de todas formas Estados Unidos debía negociar con Antigua y Barbuda para encontrar otras alternativas a dichas prohibiciones.
Ayer, en Génova, Italia, la OMC manifestó que ambas partes “le solicitaron a la entidad suspender los procedimientos pendientes hasta el próximo 23 de agosto. El panel aceptó el requerimiento”.
Mills agregó que Antigua, con 10 días de anticipación, puede revocar la suspensión del caso, llevando la disputa nuevamente a la agenda de la OMC.