La regulación del juego en Brasil se enfrenta a la oposición del sector evangélico del Congreso

Luego de la promulgación de la Medida Provisional que busca regular el juego en Brasil, el paso siguiente será la aprobación del proyecto de ley que actualmente se encuentra trabado en el Senado y al que la bancada evangélica ya mostró su oposición.

El proyecto que, además del sector online, también regulará los bingos y casinos tiene un fuerte respaldo por parte parte del gobierno. Tanto el vicepresidente Geraldo Alckmin, quien se reunió con empresarios del sector, como el flamante Ministro de Turismo, Celso Sabino, han demostrado su apoyo.

Celso Sabino, Ministro de Turismo

“Hay un proyecto de legalización de los juegos de azar, que está en el Senado, que puede favorecer el turismo. El proyecto incluye la legalización de resorts y casinos. He votado a favor”, declaró el actual ministro en 2022, cuando votó a favor de la medida siendo legislador.

Sin embargo, hay sectores del Poder Legislativo que se muestran reticentes a apoyar el proyecto, que cuenta con el aval del presidente de la Cámara, Arthur Lira. La bancada evangélica, un sector que cuenta con 130 diputados y 12 senadores, ya ha declarado que no acompañará la medida.

 Arthur Lira, presidente del Senado

Sóstenes Cavalcante, ex líder de la bancada del Legislativo en Río de Janeiro y vicepresidente del Frente Parlamentario Evangélico (FPE), y Cezinha de Madureira, del PSD de São Paulo, afirmaron que la medida es una "afrenta a la fe evangélica" y que el gobierno debería "combatir los juegos de azar". También se quejaron de que no se le había informado previamente de la medida.

El FPE intentó bloquear la regulación de las apuestas en abril pasado. Uno de los seis vicepresidentes del Frente, Marco Feliciano, había comentado en el momento que sus miembros “no tendrían cómo explicar al votante un voto a favor de la MP", ya que “el espíritu de la bancada es éste”.

Mientras un sector del gobierno, liderado por el Ministro de Hacienda, Fernando Haddad, busca apresurar la aprobación del proyecto de ley, desde el bloque evangélico se están movilizando para lograr el apoyo de diputados católicos y de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB).

Cabe agregar que la resistencia a la regulación también viene de algunos sectores del propio gobierno, como el presidente de Embratur, Marcelo Freixo, quien votó en contra del proyecto cuando era diputado e incluso hizo una publicación en las redes en la que decía que "legalizar el juego aumentará el endeudamiento y romperá familias".