Andre Gelfi, Managing Partner Brazil de Betsson Group, publicó en sus redes sociales una columna en la que enumera los beneficios de la inminente reglamentación de las apuestas deportivas en Brasil, reflexión que reproducimos a continuación.
“En los últimos meses, he seguido más intensamente las discusiones regulatorias sobre el mercado brasileño de apuestas deportivas. Mi intención es contribuir a la aplicación del decreto presidencial, que regulará el mercado de apuestas deportivas en el país”, explicó el ejecutivo.
“La Ley Nº 13.756, firmada el 12 de diciembre de 2018, debía implementarse antes de diciembre de 2022. Desgraciadamente, este plazo ya ha pasado, y aún no hemos tenido la publicación de la esperada e imprescindible normativa por parte de nuestro Ministerio de Economía”, agregó.
“A grandes rasgos, el reglamento podría justificarse por un trípode de beneficios para nuestro país:
1 - Impacto económico: recaudación directa de impuestos, inversiones y generación de empleos formales. Sólo este mercado, en 2021, movió más de R$ 100.000 millones en apuestas en el país.
2 - Prevención de la ludopatía: O como decimos en el sector, la adopción del Juego Responsable, ya que aquí tendríamos las campañas de concienciación y el seguimiento preventivo de la actividad, para proteger a los consumidores y mitigar la compulsión por las apuestas deportivas.
3 - Integridad del deporte: al organizar y exigir la vigilancia ostensible de los acontecimientos deportivos, garantizamos la transparencia de las competiciones no sólo en Brasil, sino también en el extranjero”, enumeró Gelfi.
“Como miembro del sector -finaliza su columna el ejecutivo de Betsson-, me siento responsable de promover esta agenda. Y mantengo la esperanza de que el reglamento se apruebe pronto, aunque se retrase formalmente. La esperanza cobra fuerza con un nuevo Gobierno, que esperemos sea más sensible a los beneficios de la regulación. Avancemos hacia un mercado formalizado y sostenible”.