El Parlamento de Galicia rechazó el proyecto de ley del juego del bloque socialista y solo debatirá la propuesta de la Xunta

El Parlamento de Galicia rechazó este martes el proyecto de ley del juego planteado por el Partido de los Socialistas de Galicia (PSDdeG). Con los votos oficialistas del Partido Popular (PPdeG), se determinó así que la única propuesta legislativa que se debatirá será la aprobada la semana pasada por la Xunta de Gobierno de la comunidad autónoma española.

Durante el debate, una de las voceras del PPdeG, la legisladora Paula Prado, cuestionó el proyecto del bloque socialista por, entre otros aspectos, no limitar el número máximo de salas de juego y no impedir la apertura de casas de apuestas en locaciones donde distintos grupos de vecinos se han manifestado en contra de estas.

Según distintos medios locales, la parlamentaria también invitó a los socialistas a aprovechar el trabajo realizado en su propuesta y realizar aportes en el debate de la proyecto de ley planteada por la Xunta de Galicia.

Por su parte, el vocero del PSdeG, Julio Torrado, consideró que su bloque consiguió una victoria política pese a que la votación fue contraria a su propuesta. El legislador señaló que en el bloque socialista sabían que su propuesta sería rechazada, pero consideró que se ha abierto el debate y que gracias a su iniciativa, el Gobierno gallego se vio “arrastrado” a legislar.

Cabe señalar que, a inicios de mayo, el bloque socialista registró en la cámara gallega su proyecto de ley para la regulación del juego en Galicia. En septiembre, antes de que la Xunta plantee su propuesta, había solicitado apoyo de otros grupos políticos para aprobar su iniciativa.

Representantes del bloque socialista de Galicia.

Sobre el proyecto

El jueves, la Xunta de Galicia aprobó el proyecto de ley reguladora del juego, que prevé que pueda estar aprobado definitivamente en 2023, y que limitará los establecimientos de juego, además de establecer un mínimo de 300 metros radiales de distancia a colegios, centros de rehabilitación u otros locales de juego.

El texto busca definir que las nuevas autorizaciones tengan una duración de 15 años, frente a las actuales que son indefinidas, por lo que los locales ya instalados dispondrán de este mismo período de vigencia y, mientras tanto, “pueden estar donde están”, explicó el vicepresidente segundo de la Xunta, Diego Calvo.

Además, la ley buscará limitar el número de establecimientos de juegos en toda Galicia, hasta un máximo de dos casinos, dos salas adicionales, 12 bingos, 118 salones de juego y 41 tiendas de apuestas. A partir de ello, se prevé que los nuevos negocios que se podrán abrir serán 15, en concreto una sala adicional, dos bingos, 4 salones de juego y 8 tiendas de apuestas. En cuanto al número de máquinas, se fija un número máximo de 3.600 auxiliares de apuestas y 12.000 tragamonedas.

Incertidumbre en el sector

Desde la Asociación Gallega de Empresas Operadoras (AGEO) se ha valorado de manera inicial el proyecto de ley y reconocieron que la caducidad de las autorizaciones es, efectivamente, el aspecto que más les preocupa.

Su presidente, Serafín Portas, explicó que “están estudiando en detalle” el nuevo texto, y que temen la “inestabilidad” que pueda generar la limitación temporal a las licencias. Aguardan “sensibilidad” con el sector durante la tramitación parlamentaria para obtener una normativa que responda “al interés general de la sociedad y al de la industria”.