El regulador boliviano, la Autoridad de Fiscalización del Juego (AJ), informó sobre tres operativos contra el juego clandestino en las ciudades de Tarija, donde se secuestraron 23 tragamonedas de dos locales, y Cochabamba, en donde se interrumpió la realización de un torneo ilegal de póquer.
El director regional interno de la AJ de Tarija, Wilson Murillo Paz, informó que 17 máquinas fueron decomisadas en un local de la calle Ingavi, y seis más en la zona de San Roque, ya que estos lugares "no brindan las condiciones de seguridad, legalidad ni transparencia".
La modalidad de funcionamiento de ambos negocios era a través de mensajes de WhatsApp que estaban dirigidos a un público en su mayoría femenino y en la tercera edad, algo que se pudo comprobar a la hora del ingreso a estos espacios.
Paz aseguró que iniciarán "las acciones correspondientes para sancionar a los responsables" y reconoció que a ambos lugares llegaron a través de denuncias anónimas en el sitio del regulador.
Los funcionarios de la AJ también detuvieron al organizador de un torneo ilegal de póquer que suspendieron cuando se desarrollaba en completa clandestinidad dentro de un salón de eventos de la avenida Segunda y Calle Pacheco, en la Zona Norte de Cochabamba.
Dentro del espacio había 15 personas jugando, las cuales fueron notificadas sobre su accionar. Todo el material necesario para la realización de la actividad fue secuestrado y será destruido como lo establece la Ley 060 de Juegos de Lotería y Azar.