Para Manuel San Román, titular de la Dirección General de Casinos y Máquinas Tragamonedas del Mincetur de Perú, las herramientas que ofrece el segmento online facilitan significativamente estas tareas, por sobre la modalidad de casinos y salas de juego físicas.
“Definitivamente, creo que los juegos por internet, y todo lo que existe en este momento dentro de todas estas plataformas, han nacido para ser controlados”, explicó San Román, y agregó que si bien en algunos casos “es muy complejo implementar los controles de prevención de lavado de activos y el tema de juego responsable en el segmento land-based, en las apuestas deportivas por Internet es mucho más sencillo. Estas apuestas comienzan con una inscripción que hace el cliente, y que le permite saber el tiempo de juego, el monto que va a jugar; lo que habla de políticas de juego responsable. Y es muy fácil ver su billetera, y conocer cuál es su movimiento de dinero, con lo cual es factible ver el sistema de prevención de lavado de activos de forma mucho más eficiente”.
En este sentido, el regulador destacó: “Considero que si hemos logrado controlar y regular correctamente todo lo que es el sistema de prevención de lavado de activos en land-based, va a ser mucho más fácil hacerlo dentro de todos estos juegos virtuales, por la sencilla razón de que ellos tienen toda las posibilidades de hacerlo, e incluso nacen con una plataforma que permite, de alguna manera, controlar, verificar, fiscalizar y supervisar todo lo referente al lavado de activos, al juego responsable, e incluso controlar a aquellas personas que se auto excluyan, por un tema de ludopatía”.
José Maymo Azize, director Ejecutivo de la Comisión de Juegos del Gobierno de Puerto Rico, enfatizó: “Creo que dentro de una regulación, siempre lo más importante es ver quién es el beneficiario final. Para eso, por ejemplo, la regulación en Puerto Rico señala de que solamente podrá jugar una persona que se inscriba con una tarjeta de crédito. Es un tema de siempre ver al beneficiario final, quién hace las apuestas, y quién recibe los premios; y la parte más importante, sabemos que en los locales de retail, en lo que se refiere a apuestas deportivas, el 80% corresponde a apuestas de muy baja denominación”.
Rodrigo Ajenjo, en nombre de la Superintendencia de Casinos de Juego chilena, coincidió con los reguladores de Perú y Puerto Rico, al señalar que “en el mundo online, todas las transacciones pueden tener trazabilidad y podemos saber, exactamente, de quién vienen”.
“Lo importante es que siempre haya usuarios identificados -completó-, que las cuentas sean personales, y que primero el regulador sepa quién está detrás de una cuenta. También hay que destacar que se pueda comprobar que las transacciones de dinero provengan de cuentas identificadas, nominadas, probablemente a nombre de la misma persona, cosa de tener una trazabilidad completa”, dijo Ajenjo.
El representante de la SCJ detalló que “como reguladores, es posible tener esa trazabilidad, porque es factible hacerlo con la tecnología presente de una forma más fácil, incluso, que con los casinos físicos. Probablemente se pueda controlar mejor el lavado de activos, pero teniendo la precaución de que pueden ser múltiples transacciones, en múltiples plataformas”.
“Respecto al juego responsable es lo mismo -comentó-, si tenemos la trazabilidad, tenemos la cuenta, sabemos el movimiento que tiene un jugador; entonces podemos tener una serie de parámetros para los jugadores, y señalizar si es que tienen algún problema de juego problemático o patológico que se haya transformado en ludopatía”.
“Incluir límites que puedan ser rígidos, o simplemente señalar que a los 50 o 100 dólares gastados se apaga la plataforma, son distintos mecanismos que se pueden implementar en el sector online, dada la tecnología y la trazabilidad que uno puede tener de cada una de las cuentas de los jugadores”, finalizó Ajenjo.