El proyecto de ley procede de un decreto aprobado también por unanimidad por la Diputación Permanente el pasado 29 de abril, y establece que la autorización de nuevos locales, más bingos y casinos, está suspendida hasta que se reforme la ley del juego de Canarias, con plazo máximo hasta el 31 de diciembre de 2021.
Asimismo, se amplía la Comisión del Juego y las Apuestas, medida destinada a potenciar aspectos sanitarios y educativos, con la inclusión de representantes de entidades que luchan contra las adicciones.