Las agencias de juego fueron de los últimos locales comerciales que se habilitaron en la Provincia de Buenos Aires, más allá que son considerados un comercio de proximidad y ofrecen protocolos sanitaios, indicó el titular de la entidad.
La reapertura de los locales no estuvo exenta de polémica: incluyó una marcha atrás en la reapertura, tras dos horas de funcionamiento y luego un cierre inmediato, tras la falta de acuerdo entre la Provincia y los intendentes.
Ante la posibilidad del retroceso de fase que se anunciará hoy, Iglesias advirtió: "Es perjudicial para el Estado, porque generamos un ingreso genuino y nuestra recaudación se transforma en camas, respiradores, barbijos y demás insumos que en momentos de pandemia son elementales".
En el mismo sentido, agregó que "es un recurso que el Estado no se puede perder, sobre todo ante la brusca caída de la recaudación por la escasa actividad económica".
"Entendemos desde la Cámara que el Gobierno debe tomar ciertas medidas y no volver atrás, más cuando cumplimos con todos los protocolos exigidos", enfatizó.
Por otra parte, Iglesias mostró su preocupación por la alternativa de que la gente se vuelque al juego clandestino: "Durante todo este tiempo, con las agencias cerradas, el juego ilegal volvió a ganar la calle porque la gente no deja de jugar y si paramos vuelve a resurgir".
"No se puede permitir que la gente recurra a quienes toman apuestas en forma clandestina sin protocolo, sin aislamiento, sin nada, cuando tenemos todos los protocolos para que la gente pueda jugar de manera oficial tranquilamente y con todas las normas de seguridad sanitarias que se consideraron necesarias", concluyó.
Si bien ya está decidida la reducción de la circulación de personas en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires, por ahora el gobierno de Axel Kicillof no confirmó cuáles serán los rubros que se verán afectados o recortados, aunque se estima que las loterías serían seguramente uno de ellos.