La AGA solicita ajustar el límite de informes sobre premios en slots

"A medida que la industria reabre sus locales de manera segura y busca recuperar su salud financiera, un área crítica de la reforma regulatoria que el Gobierno debería considerar es modernizar el límite de informes solicitados del premio mayor de US$ 1.200, que ha estado vigente desde 1977", señaló Bill Miller, presidente y CEO de la American Gaming Association.

“El límite actual está desactualizado, e impone importantes cargas de cumplimiento, tanto en el Servicio de Impuestos Internos (IRS) como en la industria del juego”.

En este sentido, Bill Miller consideró que “el año pasado, la AGA nuevamente alentó al Departamento del Tesoro a actualizar el límite de informes de jackpots de slots a un nivel realista, en línea con la inflación, para colocarlo en US$ 5.000. El aumento de este límite no solo permitiría al IRS enfocar sus recursos limitados de cumplimiento en aquellos contribuyentes que tienen más probabilidades de tener ganancias netas en slots al final del año contributivo, sino que también reduciría significativamente las interacciones requeridas entre los empleados y los clientes, para emitir formularios de impuesto”.

"Este cambio de políticas, respaldado por miembros bipartidistas del Congreso, ya se había retrasado mucho antes de la pandemia, y ahora tiene una importancia adicional a medida que la industria del juego emerge de esta crisis", agregó el titular de la AGA.

De acuerdo con la regulación federal, cuando un cliente obtiene un premio en una máquina tragamonedas superior a los US$ 1.200, la máquina se retira temporalmente de la operación, mientras el cliente completa un formulario de declaración de impuestos W-2G.

Si bien los pozos han aumentado constantemente con la inflación en las últimas décadas, el límite de US$ 1.200 que desencadena la emisión de formularios de impuestos se ha mantenido estático desde que se estableció en 1977. Un premio superior a los US$ 1.200 en 1977 equivaldría a más de US$ 5.000 hoy, si se ajusta por inflación.

Debido a que el umbral no siguió a la inflación, ha habido un aumento significativo en el número de pozos y operaciones reportables, lo que causa más ineficiencias operativas y se suma a una amplia cantidad de formularios W-2G que actualmente inundan al IRS, ya con poco presupuesto y poco personal cada año.