MGM Resorts International acordó vender el MGM Grand Las Vegas a una joint venture entre Blackstone Group y MGM Growth Properties por alrededor de US$ 2.500 millones. De esta manera, se desprende de una de sus últimas propiedades en Estados Unidos y está próxima a convertirse en una operadora de casinos sin bienes inmobiliarios. Recibirá US$ 2.400 millones en efectivo y US$ 85 millones en capital, y continuará operando el casino MGM Grand bajo un contrato de arrendamiento a largo plazo.
Blackstone tendrá una participación del 49,9%, mientras que MGM Growth Properties contribuirá con el complejo Mandalay Bay a cambio de una participación controladora del 50,1%. MGM Growth es un fideicomiso de inversión en bienes raíces creado en 2016 que se cotiza por separado.
"Nuestro objetivo es súper claro: seguiremos monetizando nuestros activos inmobiliarios para generar capital a nuestros accionistas al tiempo que obtenemos flexibilidad para perseguir nuestras iniciativas de crecimiento, que incluyen a Japón y al mercado de apuestas deportivas", explicó Jim Murren, presidente y CEO de MGM Resorts.
MGM se propone reinvertir en mercados en crecimiento como las apuestas deportivas y en un posible complejo de casinos en Japón. MGM Growth tiene una opción para comprar el MGM Springfield en Massachusetts. MGM Resorts continúa siendo propietario del proyecto CityCenter en Las Vegas, en una empresa conjunta con la firma de inversión de Emiratos Árabes Unidos Dubai World, y tiene una participación mayoritaria en MGM China, los casinos de la compañía en Macao.