Abren una ludoteca con fondos provenientes de juegos de azar

Participaron de la inauguración autoridades de Lotería y del Servicio Penitenciario Bonaerense, entre ellos el director general de Asistencia y Tratamiento, inspector general Eduardo Benavides; la directora de Población Carcelaria, inspectora general Andrea Castelli; la directora de Niñez y Familia, prefecto Andrea Bartolomé, el jefe de Complejo Conurbano Suroeste, inspector mayor Hernán Suárez; y el secretario del complejo, Ariel Gómez. También estuvieron presentes el presidente de PRASAM, Daniel Rosenberg, y las licenciadas Gabriela Guglielmo y Gabriela Grieco, ambas pertenecientes a la Comisión Directiva de la fundación.

Eduardo Benavides afirmó que “éste tipo de actos producen una gran emoción y trasforman el paradigma al permitir que las familias, grandes y chicos puedan divertirse y disfrutar de un momento distinto”.

Por su parte, el presidente de PRASAM agradeció el trabajo articulado con las instituciones para fortalecer los derechos del niño, en un espacio tan difícil y gris. “Que hoy los niños tengan una sala de juegos que puedan compartir con sus padres, hace una gran diferencia en sus realidades, mejora la calidad de vida, crea otro tipo de lazos. Desde el juego, la educación y el diálogo se construyen bases para que los niños desplieguen sus potencialidades e incorporen valores en un contexto de amor” destacó Rosenberg.

La Unidad Penitenciaria N° 40, de máxima seguridad, fue inaugurada en 2006 y cuenta con una capacidad total de 424 plazas, 360 de las cuales pertenecen al sector masculino.

Los internos realizan labores en sector cocina, mantenimiento, parques y jardines, Cuentan con un taller de carpintería, taller de reparaciones y ensamblado de computadoras, impresoras y rellenado de tóner, taller de reparación de pelotas, entre otros.

PRASAM desarrolla programas sociales dirigidos a poblaciones de niños y jóvenes en situación de extrema vulnerabilidad en los partidos de Almirante Brown, Ezeiza y Lomas de Zamora. En tal sentido, gestiona un comedor comunitario, brinda apoyo escolar y desarrolla una red de alimentos, entre otras actividades. Además, en sus instalaciones funciona una ludoteca como espacio integrador, donde niños y niñas participan de talleres de juego donde el eje de las actividades está puesto en la estimulación y el empoderamiento con propuestas y abordajes que apuntan a la educación no formal como estrategias preventivas de la violencia y las adicciones.

Esta acción fue posible en el marco de la Ley N.º 11.018, que delega la titularidad de las salas de bingo a entidades de bien público, las cuales perciben un porcentaje de las utilidades producidas (Ley N.º 13.063). Ello, con el objeto de que parte de lo que se recaude por el juego vuelva a la comunidad.

A partir de 2016 se realizaron por primera vez visitas a todas las entidades titulares de las licencias de explotación distribuidas en todo el territorio provincial. De las visitas realizadas, se detectaron una serie de irregularidades que llevaron al Instituto a iniciar un proceso de renovación de entidades, priorizando entidades vinculadas a adicciones y vulnerabilidad en la niñez. Cabe destacar que este trabajo se realizó en conjunto con SEDRONAR, Ministerio de Desarrollo Social y Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires.

Esta nueva etapa se caracteriza por el control y seguimiento de los planes de inversión, ahora anuales, de las entidades con el objeto de asegurar la utilidad social del destino de los fondos.

Así, PRASAM, incorporada como entidad beneficiaria en 2019, incluyó en su plan de inversión, la creación de 8 ludotecas en unidades penitenciarias de la provincia. Esta propuesta se presenta como una estrategia para el abordaje especializado de hijos de padres/ madres privados de su libertad. El enfoque que se pretende imprimir es el de fortalecimiento familiar, con estrategias de intervención comunitaria, interinstitucionales y con perspectiva de Género. La fundación parte de diferentes dispositivos, bajo la modalidad de talleres participativos en sus propios pabellones haciendo hincapié en lo vincular y en sus propias historias de vida. Asimismo, desde lo comunitario, trabaja bajo dispositivos que promuevan alternativas de inclusión social y el desarrollo de un contexto comunitario que fomente una construcción superadora de la ciudadanía.