Los policías secuestraron un teléfono fax, anotaciones alfanuméricas relacionadas a juegos clandestinos y dinero en efectivo en moneda nacional y extranjera (6.960 pesos argentinos y 108 dólares), entre otros elementos de interés para la causa.
Los investigadores realizaron tareas por infracción a la Ley de Juegos de Azar y con orden judicial -rubricada por el Dr. José Ruhl, Juez de Garantías N° 2- requisaron el domicilio, donde secuestraron los elementos mencionados.
En relación al procedimiento, los efectivos policiales identificaron al propietario de la vivienda, un hombre de 49 años, quien quedó supeditado a la causa pero no fue detenido. Según consta en el informe policial, la hija del allanado desconectó el teléfono fax y el hijo del allanado lo trasladó a una plaza contigua al domicilio, donde lo dejó abandonado para, luego, salir corriendo.
Este operativo se suma a los ya realizados, y constituye un duro golpe a la clandestinidad en la provincia de Entre Ríos y una seria advertencia: el juego ilegal no es una contravención; es un delito penal.