Marina del Sol inició operaciones en sus nuevas salas de Calama y Osorno

Esto permite que el grupo empresarial, compuesto por capitales chilenos y canadienses, inicie sus operaciones en ambas ciudades. De esta forma, la casa de juegos de Talcahuano aumenta su participación en el mercado nacional, transformándose en el tercer operador chileno, junto con Monticello-Dreams y Enjoy.

Según datos de la Superintendencia de Casinos, a noviembre del año 2015 las tres casas de juego suman un total de 1.148.849 personas en sus salas, y al primer semestre del ciclo anterior mantienen un gasto promedio de $42.113 pesos por visita (58 dólares).

Para Nicolás Imschenetzky, presidente de Marina del Sol S.A., el desafío será replicar el estilo de la casa de juego del Bío Bío, al norte y sur del país, entregando una oferta de entretenimiento integral en estas ciudades.

“Hemos visitado tanto Calama como Osorno y estamos seguros que podremos hacer un gran trabajo en estas ciudades. Hoy nuestro equipo crece y ya somos 1.000 personas en las empresas Marina del Sol. Esto sin duda es una de las cosas que más nos enorgullece en este negocio, pues las personas son fundamentales. No nos cabe duda que lograremos unificarnos y traspasar nuestra filosofía orientada al cliente y el servicio de Calidad. Al final del día son nuestros mismos clientes los que nos dicen cómo se quieren entretener y nuestra meta es aprender a escuchar e implementar sus peticiones. Pese a estar a más de dos mil kilómetros de distancia, son lugares con muchos puntos en común, pero la diferencia estará en los detalles y la cercanía. Ya estamos organizando nuestros pasos a seguir en pos de la satisfacción de nuestros nuevos “Socios MDS” para asegurar que su experiencia en entretención mejore de manera continua”, comentó desde Santiago.

Uno de los primeros pasos de la compañía, señaló Imschenetzky, será “ordenar los procesos, implementar un sello de calidad única en el mercado nacional, marcar la diferencia y encantar con el estilo Marina del Sol, lo que será clave. La verdad es que buscaremos sorprender a quienes ingresen a nuestras salas y a toda la industria nacional”, consignó Imschenetzky, quien además señaló que éste es el inicio de un año crucial para la empresa, que también competirá por el control de casinos municipales.

Además, Marina del Sol sigue en competencia por la licencia del Casino de Chillán, proceso que hoy se encuentra judicializado, y en donde la empresa mantiene la convicción de que su proyecto es el mejor y será el ganador.

Los casinos de Calama y Osorno fueron controlados durante siete años por la empresa de origen panameño Latin Gaming, que mantiene el control en Chile del Casino Municipal de Arica, Casino del Pacífico (San Antonio) y Gran Casino Los Ángeles. Marina del Sol asegura que será un gran desafío trabajar para mejorar la gestión de una empresa con la trayectoria de Latin Gaming, pero que sin duda este cambio generará un nuevo aire e impulso en estas operaciones.