“En todo el edificio no se siente el aire acondicionado, eso es malo, pues mucha gente llega y hay ocasiones donde parece que a uno le falta el aire, además, el trato por parte del personal no es el mejor, es casino va a la baja de manera notable”, señaló una fuente anónima.
La misma fuente indicó que las señales de salidas de emergencia no se encuentran en lugares visibles, y que en una situación de riesgo, la gente no cuenta con información necesaria para actuar de la manera correcta y salva guardar su integridad.
Sumado a esto, se encuentra el hecho de que de las cerca de mil 500 máquinas de apuestas, que tiene Casino Palace, sólo funcionan cerca de 800, y la mayor parte de los juegos de azar se encuentran con desperfectos.
“Las máquinas en mal estado están en el segundo piso, ahí son pocas las que funcionan de manera correcta; han estado en esa situación desde hace más de dos años”, expresó la fuente.
Cabe señalar, que sumado a las quejas actuales hacia este casino, durante el 2009, el Palace fue clausurado por autoridades municipales, debido a que en una revisión de rutina, realizada por inspectores de la Dirección de Fiscalización, encontraron en su interior a menores de edad que apostaban, lo cual está prohibido de manera por las reglamentaciones al respecto. Al cabo de unos meses, la orden de clausura fue revocada por autoridades federales, a pesar de la queja interpuesta por la administración municipal en turno.
El Casino Palace abrió sus puertas en septiembre del 2009, en un inicio con 305 máquinas, además de un centro de apuestas deportivas.
Al día de hoy, se contabilizan al menos el triple de máquinas en los dos niveles del edificio, además de una afluencia al día de más de 1.500 personas.