El Proyecto de la Cámara 916 propone crear un Sistema Integrado Regulador (SIR) para fiscalizar las citadas máquinas que, según reafirmó en la audiencia la Compañía de Turismo, operan en violación a la Ley de Juegos de Azar. La medida es una de varias propuestas para allegar más fondos al erario, principalmente al Sistema de Retiro del Estado Libre Asociado, que tiene un una deuda de U$S 35.000 millones.
Ingrid Rivera, Directora de la Compañía de Turismo, les anticipó a los periodistas, antes de testificar ante los representantes, que su agencia se opone al Proyecto 916. Minutos antes, el Subsecretario de Hacienda, Pedro Cintrón, levantó reparos sobre ciertas disposiciones de la medida, y destacó que la dependencia las auscultaría con las partes interesadas para eventualmente adoptar una posición formal sobre la propuesta.
Mientras el Departamento de Hacienda estimó que la implantación de un sistema regulador de esas tragamonedas no es viable a corto plazo, operadores de las máquinas opinaron que en 180 días es posible instalar conexiones para someterse a la regulación electrónica de esa agencia.
Por su parte, Eric Navarro, portavoz de la compañía Empresa Puertorriqueña de Recreación Comercial (Emprecom), que representa a operadores de las cuestionadas máquinas, anticipó que el Proyecto 916 contiene múltiples errores y opinó que, de aprobarse, abriría la puerta para delegar la regulación a una empresa privada, en lugar de establecerse fiscalización de Hacienda.
En declaraciones a periodistas, antes de participar en la vista, Navarro rechazó que la operación de esas máquinas represente un reto a la clientela regular de casinos de hoteles e insistió en que si el Departamento de Hacienda crea un sistema para regularla se podrían crear unos 5.000 empleos.
Navarro subrayó que forma parte de una empresa que ha operado en el país por 20 años “y, por esfuerzo propio, nos hemos ganado un espacio” en el mercado, y están dispuestos a pagar U$S 250 por la licencia de cada máquina.