De esta forma, Casino Dreams Coyhaique abrió anoche sus puertas al público, luego de la certificación entregada por la SCJ (Superintendencia de Casinos y Juegos). “El casino más moderno de la Patagonia”, junto al Dreams Punta Arenas, cuenta con 150 máquinas de azar, 10 mesas de juegos, 38 posiciones de bingo y una variada cartelera de eventos y espectáculos. Una vez terminado, el proyecto integral generará 200 empleos directos, de los cuales cerca del 90% será tomado por habitantes de la región de Aysén.
La apertura del casino Dreams Coyhaique –del grupo Fischer y Citigroup- es la primera de las salas de juegos que se esperaban para este año, producto de la nueva ley de casinos. Ésta es solo la primera etapa del proyecto integral, el que considera para mayo la inauguración de un hotel de seis pisos con estándares de servicio cinco estrellas, la construcción de un bar, una cafetería, un restorán, un centro de convenciones que también funcionará como centro de eventos y una sala de teatro.
"Esta apertura es una señal del liderazgo que Dreams tiene en el sur de Chile y consolida nuestro compromiso con la actividad turística y económica de la región de Aysén, una zona con potencial para futuras inversiones y crecimiento económico” dijo Jaime Wilhelm, gerente general de Dreams.
El proyecto integral de casino y hotel tiene un significado especial para el presidente del directorio de Dreams, Claudio Fischer, quien conoce Coyhaique desde su niñez y que por esta razón prestó especial atención a la arquitectura y forma en que la nueva construcción se inserta en la ciudad, destacando por la utilización de materiales nobles de la zona como son los tingles de lenga austral, las piedras bien trabajadas y el aire patagónico que se mezclan con modernos sistemas de iluminación y visuales para darle el toque de centro de entretención que se busca.
Durante la Etapa de Verificación del Cumplimiento del Proyecto, la Superintendencia revisó, entre otros aspectos, todo el material de juego. Constató que todas las máquinas de azar fueran nuevas, sus instrucciones estuvieran en español y garantizaran un porcentaje de premio esperado para el jugador no inferior al 85% del total de combinaciones de jugadas posibles.
Cabe recordar que los casinos de juego deben pagar un impuesto específico, equivalente al 20% de los ingresos brutos del juego, el que es distribuido en partes iguales entre el Gobierno Regional y la Municipalidad respectiva para ser invertido sólo en obras de desarrollo.
Por su parte, el casino de juego de Castro se encuentra en su fase final de materialización y tiene como plazo máximo de entrega el 8 de mayo próximo.