Según el desglose de 2008 al mes de agosto de este año, la Federación captó más de 1.049 millones de pesos (U$S 78.769.129) únicamente por las licencias otorgadas a la industria del juego.
Si este monto total se sumara a los 1.307 millones de pesos (U$S 98.142.280) que el gobierno federal obtendrá el presente año por la recaudación del Impuesto Especial a la Producción y Servicios (IEPS) a esa industria, la cifra ascendería a 2.356 millones de pesos (U$S 176.911.409).
Además, con el incremento de impuestos planteado al Congreso de la Unión, la proyección de Hacienda para 2010 es de 2.536 millones de pesos (U$S 190.427.561), según consta en La Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal del próximo año.
La información señala que en lo que va de 2009 las percepciones generadas por ferias, sorteos, gallos, carreras de caballos, hipódromos, galgódromos, centros de apuesta, entre otros, ha sido de 416.279.110 pesos (U$S 31.258.287).
En 2008 el monto por “cuotas de aprovechamiento” -como se le llama a este cobro- ascendió a 633.419.817 pesos (U$S 47.563.324), en contraste con los 561.371.344 pesos (U$S ) reportados en 2007. En 2006 las arcas federales recaudaron la suma de 259 millones de pesos (U$S 42.153.224).
Lo anterior indica que desde que inició el sexenio del Presidente Felipe Calderón, el cobro por concepto de permisos a la industria del juego ha sido un negocio rentable, pues la recaudación creció en los últimos tres años.
Hasta 2007, Gobernación tenía registrados 165 centros de apuestas remotas y 142 salas de sorteos activos, y estaban por iniciar operación otros 194 centros y 191 salas.
El artículo quinto de la Ley de Juegos y Sorteos dice que toca a Gobernación fijar la participación que le corresponde al gobierno federal en los permisos que conceda para juegos y sorteos, al margen de los impuestos que al efecto determinen las leyes fiscales.