A pesar de que aún continúan las obras, José Berardo, representante de la Compañía de Entretenimientos y Turismo (CET), mencionó que la idea es llegar a cortar la cinta del emprendimiento de la cadena Howard Johnson días antes de fin de año.
De este modo, la habilitación del complejo llegará más de un año después de la fecha que inicialmente se había previsto en los pliegos de licitación. En este sentido, vale recordar que el 30 de diciembre es la fecha límite, según la addenda (prórroga del contrato) que se hizo en septiembre del año pasado, fecha inicialmente prevista para la inauguración del hotel.
El Hotel-Casino es una estructura de 4 estrellas, que alberga unas 41 habitaciones, gimnasio, sala de convenciones, sauna y jacuzzi. En total, el proyecto demandó una inversión de 22 millones de pesos (U$S 7,2 millones). Sin embargo, tanto el comedor como el bar, no correrán directamente por cuenta del hotel, sino que serán servicios tercerizados.
De todos modos, la apertura oficial de este emprendimiento tiene una importancia especial, ya que contemplará a su vez la habilitación de un casino con tragamonedas, una cuestión que genera polémica en absolutamente todas las ciudades. Además de las slots, el casino local también contará con juegos de paño, como cartas y dados.
Según trascendió extraoficialmente, las máquinas ya han arribado a Villa María y ya han sido instaladas, por lo que sólo están esperando comenzar a ser utilizadas.
Entre otras cuestiones, se supo que en esta primera temporada de verano se sumarán más de 100 empleados al emprendimiento, de los cuáles el 90% pertenece a la ciudad o la región.
“En su mayoría se tomó personal local, ya que conocen el lugar y sería imposible trasladar la cantidad de personas a la ciudad. Sólo algunos puestos administrativos se instalarán a vivir en Villa María para trabajar”, manifestó Berardo.
Al respecto, el funcionario de CET detalló que cumplirán labores en el casino unas 70 personas, mientras que 25 empleados más trabajarán dentro del hotel, abarcando desde la conserjería hasta el personal de mantenimiento. Por otra parte, se han sumado también 25 personas más para trabajar en la gastronomía.
“No fue una elección tan exigente como se cree. Sí pedimos experiencia previa, y si se conocía algún idioma se tenía en cuenta, aunque no era excluyente”, aseguró Berardo, quien reconoció que recibieron una multitud de Currículums Vitae de gente que quería ingresar a trabajar al hotel
Por último, ante la posibilidad de inaugurar primero el casino y luego el hotel, se aseguró que “se trabaja intensamente para abrir todo de una sola vez”, aunque la gran fiesta se podrá disfrutar recién el año próximo.