Por un lado, el relator Garibaldi Alves (PMDB-RN) reafirma que la comisión aprobó la propuesta de anexar al documento cerca de cinco proyectos sobre la regularización de bingos en el país, inclusive uno en contra de la liberación del juego. Por otro lado, el senador Romeo Tuma (PFL-SP) dijo que eso no ocurrió y que el informe no podrá ser encaminado al Ministerio Público en casa de que se haga cualquier remisión a los proyectos.
“Fue una decisión de la CPI de mandar los proyectos, los que están en contra y los que están a favor. Están haciendo una tempestad en un vaso de agua”, dijo Alves.
“Lo que quedó acordado es que el senador Garibaldi Alves podría, como parlamentario, presentar el proyecto de él. Pero no puede vincularlo al informe de la CPI porque eso no fue votado”, dijo Romeo Tuma.
A pesar de la tranquilidad demostrada por el vocero, técnicos de la CPI examinaron la grabación de audio y las notas taquigráficas de la sesión de la CPI el último martes, cuando el informe fue aprobado. La versión final del texto, tras el chequeo, deberá estar disponible.
El objetivo de la consulta a las notas taquigráficas y a la grabación es esclarecer si los senadores aprobaron la propuesta de anexar los proyectos. Eso porque, durante la votación, ellos habían acordado en dejar afuera del informe cualquier mención a la regulación de bingos en el país.
Tuma dijo que la retirada de los proyectos ocurrió en medio del acuerdo para garantizar la votación del informe final. Según él, esa posición fue explicitada tanto por él como por el senador Magno Malta (PL-ES), que había preparado un voto por separado, y por el líder del PFL, el senador Agripino Maia (RN).
Tuma afirmó que eso está grabado y, por lo tanto, debe ser parte de las notas taquigráficas de la sesión. Según él, el informe corre el riesgo de ser invalidado.
“No va a ser válido. Esa parte no tiene valor porque no fue votada. Al contrario, fue grabada la insistencia para retirar eso del texto”, dijo Tuma, recordando que fue noticia esta semana la intención de dueños de bingos de financiar las campañas de políticos simpatizantes de la regulación del juego.
Según Garibaldi Alves, la decisión de los senadores fue respetada, una vez que el texto principal no trata el tema. Él dijo que el velatorio trajo apenas una indicación de la existencia de los proyectos, uno de ellos de su autoría, proponiendo la legalización de los bingos.