De acuerdo con la reforma a la norma, se debe cambiar el exagerado incremento de los derechos de explotación, que corresponde a un aumento del 900%, teniendo en cuenta que este valor se encuentra indexado y se reajusta automáticamente cada año para el caso de la base gravable de los juegos operadores de Etesa.
La propuesta indica que el incremento de estos rubros, no debería superar el 5%, como se había calculado con base en el presupuesto de operación del Gobierno. Igualmente, la Federación Colombiana de Empresarios de Juegos de Suerte y Azar, Feceazar, y la Federación Colombiana de Juegos, Fecoljuegos, piden eliminar las competencias que tienen los alcaldes para determinar si se puede abrir o no un establecimiento de juego.
En el texto de la norma que discutirá el Congreso de la República, consideran los empresarios de juegos que el 17% de rentabilidad no guarda las márgenes de rentabilidad del negocio y consideran que ese nivel de tarifas, se perdería cualquier factibilidad económica para el operador.
En su concepto, se debe partir de un estudio de las márgenes de utilidad del negocio y tratar de establecer un nuevo esquema orientado a estratificar las tarifas de acuerdo con la ubicación de los locales, el tamaño de los mismos, el tiempo de juegos que explote (casinos, bingos, salas de máquinas) y el estrato de población que atienda.
Respecto a la exigencia de información, los operadores están de acuerdo en suministrar toda aquella que sea necesaria para el cumplimiento de la función de Etesa, pero evitando la duplicidad en el envío de los mismos informes a varias entidades y con igual propósito.