En el caso de los casinos, la gente mayor de 18 años tendrá que mostrar una prueba de su identidad - pasaporte, licencia de conducir o tarjeta de crédito más una factura de un servicio para convertirse en miembro, y podrá jugar directamente. Para el bingo, se requiere una prueba de la edad.
“Los clubes de casinos y bingos han sufrido por ideas equivocadas. Ahora la gente podrá experimentar en forma inmediata la diversión y el entretenimiento sin tener que esperar 24 horas, algo que nunca fue necesario para jugar a la lotería o apostar a un caballo, por ejemplo. Esto nos pone en igualdad de condiciones con otros rubros dentro del sector”, dice Richard Sowerby, director de ventas y marketing de Gala Group, uno de los principales operadores de casinos en el Reino Unido.